SUCESOS DETENCIÓN
Una agresión a un interventor para 40 minutos el tren en Bell-lloc
El agresor, un pasajero, fue detenido por los Mossos d'Esquadra || El arrestado, de 27 años, también rompió a pedradas un cristal y una máquina expendedora
Imagen ayer de la estación de tren de Bell-lloc, donde ocurrieron los hechos.
Los Mossos d’Esquadra detuvieron ayer por la mañana en Bell-lloc a un pasajero de un tren acusado de agredir al interventor y causar daños en el convoy, que estuvo parado durante unos 40 minutos en la estación. El hombre, de 27 años, fue arrestado como presunto autor de los delitos de daños y lesiones, según informaron desde la policía catalana. Los hechos tuvieron lugar sobre las 11.00 horas en la estación de Bell-lloc cuando hizo la parada un tren de la línea R-12 entre L’Hospitalet de Llobregat y Lleida –la línea que pasa por Manresa–, con salida a las 7.45 horas y que debía llegar a 11.06 horas a la capital del Segrià.
Por causas que se desconocen, un usuario faltó al respeto, insultó, amenazó y agredió al revisor, al que dio varias patadas. Además, rompió el cristal de un vagón de una pedrada y también causó daños en una máquina expendedora. Otros usuarios llamaron al 112 y hasta el lugar acudieron varias patrullas de los Mossos d’Esquadra.
Un testigo explicó que la policía tardó unos 25 minutos en llegar al lugar. También se desplazó una ambulancia del Sistema d’Emergències Mèdiques, que atendió al revisor. Los agentes arrestaron al hombre, de 27 años, como presunto autor de un delito de lesiones y otro de daños y lo trasladaron a la comisaría de Mollerussa.
Por su parte, el tren pudo finalmente continuar su recorrido hasta Lleida. Poco después, sobre las 12.20 horas, salió un tren desde la capital del Segrià con destino a L’Hospitalet de Llobregat, según informaron desde Renfe. El tren estuvo parado unos 40 minutos por lo que no llegó hasta alrededor de las 12.00 horas a la capital del Segrià.
No es la primera vez que se registra un incidente delictivo en la línea de Manresa. En noviembre de 2018, por ejemplo, un acto vandálico obligó a suspender un tren de Cervera a Lleida. Unos grafiteros pintaron la parte frontal de la cabina, lo que impedía la visibilidad al conductor.
En 2017 también detuvieron a tres jóvenes por ataques vandálicos similares. Los agentes intervinieron 47 potes de pintura. También han tenido mediar en alguna discusión entre pasajeros.
En otras líneas de Catalunya se han producido agresiones a interventores y vigilantes. En uno de estos casos, el arrestado fue condenado al pago de una multa (ver desglose).
