Más radares para frenar un julio horroroso con 9 muertes en las carreteras de Lleida

El Servei Català de Trànsit anunció ayer la puesta en marcha de varias medidas “para contener la accidentalidad mortal y reforzar la seguridad vial” después de que en lo que llevamos de julio han perdido la vida nueve personas en las carreteras de Lleida, la misma cifra que en todo el primer semestre del año (ver SEGRE de ayer). 

Una de las medidas es el incremento de la vigilancia por parte de los Mossos d'Esquadra, en “una intensificación y refuerzo de la presencia policial en puntos estratégicos de la red viaria leridana”. La otra es la colocación de varios radares en remolque. “Se instalarán carros radar en tramos especialmente sensibles para controlar la velocidad y reducir conductas de riesgo”, afirmó Trànsit.

Estos nuevos radares ofrecen una mayor precisión en la detección de infracciones de velocidad. Por último, los paneles de mensaje variable informarán de las víctimas mortales registradas este mes de julio y recordarán la necesidad de extremar la precaución. El pasado domingo, el lunes y el martes hubo tres siniestros mortales en Alfés, Balaguer y Vila-sana, respectivamente.

Además, Trànsit hizo un llamamiento “a la responsabilidad de todos los conductores y se pide moderar la velocidad, evitar distracciones al volante y respetar las normas de circulación”.

Vuelco en El Talladell

Por otra parte, un camión volcó ayer por la mañana en el lateral de la autovía A-2 en la altura del Talladell, núcleo de Tàrrega. El siniestro se produjo en el kilómetro 510 y los servicios de emergencia recibieron el aviso a las 9.23 horas. Hasta el lugar se desplazaron cuatro dotaciones de los Bomberos de la Generalitat, una ambulancia del SEM y varias patrullas de los Mossos d’Esquadra. Se trata de un camión de semirremolque que transportaba losas de hormigón. Cuando llegaron los servicios de emergencia, el conductor, que resultó herido leve, se encontraba fuera de la cabina y fue atendido por el SEM. A raíz del vuelco, hubo una fuga de aceite y gasoil. Los Bomberos y operarios de mantenimiento de la vía achicaron las fugas y limpiaron la calzada. Los Mossos d’Esquadra se quedaron hasta que llegó una grúa para retirar el vehículo.