El pla de Lleida doblaria la població en 17 anys amb el flux migratori actual

La demarcación de Lleida duplicará su padrón en 17 años si mantiene su crecimiento demográfico, basado en un potente flujo migratorio de llegada que compensa con creces las pérdidas vegetativas de la población autóctona. “Lleida está teniendo un crecimiento del 4,31% desde 2021”, explica el profesor de Geografía de la UdL Joan Ganau. Las cifras de ese cuatrienio apuntan, con las fórmulas que se utilizan en demografía, a que el censo se duplicaría en de 16,91 años (16 años, 10 meses y 29 días).
En esos cuatro años, el aumento neto de habitantes por migraciones con el exterior ha sido de 24.638 personas. En ese periodo, y según los datos del INE (Instituto Nacional de Estadística), el número de residentes en Lleida nacidos en territorio del Estado español se redujo en 5.400 personas.
Eso da un saldo de 18.968 habitantes, un 4,31% sobre la población inicial del periodo (439.727). “Más del 4% de los habitantes lleva menos de un lustro aquí, ha llegado en los últimos cuatro años”, anota Ganau, quien llama la atención sobre otro hecho estadístico: “desde la pandemia, la población de origen extranjero de Lleida ha pasado del 20% al 25%”. “El proceso se está desarrollando con rapidez en una provincia con una población muy envejecida como es la de Lleida”, advierte el geógrafo.
La demarcación presenta un índice de envejecimiento de más del 130%, lo que indica que los habitantes de más de 65 años suman un tercio más que los de hasta 16, y eso tiene consecuencias biológicas: 3.173 nacimientos por 4.221 fallecimientos, con un retroceso vegetativo de más de mil personas en un año que la llegada de migrantes jóvenes no es capaz de revertir.
La tasa de nuevos residentes se eleva al 8,2%, uno de cada doce, si a los nacidos en otros países se les suman los 13.204 residentes que tenían hasta cuatro años a comienzos de 2025.