La estatua de Balaguer ya luce en la Bienal de Arte de Venecia

El Institut Ramon Llull presentó ayer las obras con las que Catalunya participa por décimo año consecutivo en la Bienal de Arte de Venecia, que abrirá al público el sábado. Mañana viernes se inaugurará el pabellón catalán en los Cantieri Navali de la isla de San Pietro veneciana, incluido en los denominados Eventi Colateralli, la serie de propuestas complementarias a las exposiciones internacionales y los pabellones estatales. La exposición Catalonia in Venice - to Lose Your Head (Idols), comisariada por Pedro Azara, reflexiona sobre la particular e intensa relación del ser humano con las estatuas, jugando con el doble sentido de la expresión “perder la cabeza”. Entre las 15 estatuas “adoradas o vandalizadas” de la expsición, destacan cuatro obras originales trasladadas a Venecia para la ocasión, entre ellas el Monumento a los caídos de Balaguer, retirado de la plaza Mercadal en 1982 y que, tras su exhibición en Venecia hasta el 24 de noviembre, será restituida por el municipio en un emplazamiento aún por decidir. Como publicó SEGRE el mes pasado, la escultura obra del barcelonés Genaro Iglesias fue inaugurada en 1963 por el propio caudillo, Francisco Franco. El artista, represaliado por el régimen dictatorial y ‘exiliado’ en Balaguer, acabó transformando el encargo inicial de un soldado con fusil por un payés con una azada. En Venecia compartirá protagonismo con el Pas de Setmana Santa del Sant Enterrament (1942-1944), de Salvador Martorell, de Tarragona; Record d’un malson (1991), de Joan Brossa, y el Monument a Lluís Companys (1998), de Francisco López, de Barcelona.

Performance escultórica La exposición que los visitantes encontrarán en el interior del pabellón catalán se complementará con una performance del actor y director teatral Marcel Borràs. Se trata de una recreación teatralizada en la que la actriz Marta Aguilar tomará la forma de diferentes estatuas que a lo largo de los años han sido víctimas de ataques u objeto de adoración en Catalunya. En la performance se contextualizarán las esculturas que se representarán y se invitará a los espectadores a participar reproduciendo los actos de adoración o los ataques sufridos.