Sada comunica el cierre del matadero de Lleida y el despido de 260 empleados

La dirección del matadero de pollos que Sada posee en Lleida, y que da empleo a unos 260 trabajadores, comunicó ayer por la mañana al comité de empresa su decisión de acordar un expediente de extinción de empleo para toda la plantilla y cerrar las instalaciones de sacrificio, despiece y expedición, en las que había invertido 12 millones los últimos años.

La dirección del matadero de aves que la firma Sada, del grupo holandés SHV, posee en el polígono industrial El Segre de Lleida comunicó ayer a los representantes del comité de empresa su decisión de cerrar la planta leridana y acordar un expediente de extinción de empleo que afectaría a los 260 trabajadores, entre matadero, sala de despiece y oficinas, que posee la multinacional en Lleida. Según explicaron ayer los representantes de los trabajadores, la dirección de Sada les informó que había adoptado esta decisión “por las pérdidas acumuladas en los últimos cuatro años y que, dicen, no han revertido pese a los planes de viabilidad e inversiones efectuadas”. Al respecto, el presidente del comité de empresa, Juan Noguero, de CCOO, rechazó estos motivos y acusó a la dirección de Sada “de ser quien realmente ha hundido la empresa con sus decisiones”. Noguero afirmó que “hace cuatro años nos anunciaron que el matadero de Lleida iba a ser el puntal del grupo, que iban a invertir 9 millones de euros en una nueva sala de despiece y tres más para modernizar el muelle de expediciones y ahora cierran”. Al respecto, Xavier Perelló, responsable de Alimentación de UGT, tampoco compartía la idea de las pérdidas y aseguró que “reclamaremos a la empresa que nos presente sus cuentas y demuestre las pérdidas”, añadiendo que “mucho nos tememos que estemos ante un posible fraude al pedir el cierre y dejar a 260 familas en la calle para poder vender la planta más barata a algún posible comprador”.

Noguero fue más allá y denunció que “el anuncio de cierre y los despidos se sustentan en que dicen que pierden unos 600.000 euros anuales” y aseguró que “todo es fruto de una mala gestión que provoca que cierren de golpe y porrazo”.

“Tememos que quieren vender la planta de Lleida limpia de empleados, y no lo aceptaremos”

Según explicaron fuentes de los trabajadores, Sada, pese a las inversiones en el matadero y sala de despiece, decidió hace un par de años trasladar todo el sacrificio de aves a sus instalaciones de Valencia, reduciendo los sacrificios en Lleida a unos 18.000 pollos diarios, “apenas el 20% de su capacidad”. Además, de Valencia, aseguraron, “se transportan de nuevo a Lleida para el despiece y, de nuevo a Valencia para su comercialización, una decisión que encarece el producto y genera las pérdidas que dicen”. “Se ha potenciado la planta de Valencia y hundido la de Lleida”, coincidieron Noguero y Perelló, una opinión que SEGRE no pudo contrastar con los responsables de Sada en Lleida pese a las múltiples llamadas efectuadas a lo largo del día de ayer.

Dos asambleas convocadas para hoy y anuncio de movilizaciones

El comité de empresa de Sada en Lleida ha convocado para hoy al mediodía dos asambleas de trabajadores para explicar los términos del expediente de extinción y del cierre de la empresa que les comunicó ayer la empresa. Desde el comité de empresa se informó ayer que “hemos exigido a la empresa que presente los balances de cuentas y que nos demuestre las pérdidas que dicen que tiene”. El presidente del comité, Juan Noguero, como Xavier Perelló coincidieron en que “nadie entiende que se haga una gran inversión en unas instalaciones para trasladar después la producción dejándola bajo mínimos y ahora cerrar”.

Por esta razón, el comité reunirá hoy a la totalidad de la plantilla para explicar los pormenores de la decisión de Sada y proponer posiblemente el inicio de un calendario de movilizaciones en defensa de la continuidad de la empresa y sus puestos de trabajo. Según señalaron ayer fuentes sindicales, “ya hemos informado de la decisión a las autoridades civiles y laborales para que a nadie coja por sorpresa si los trabajadores decidimos defender nuestros empleos”. La empresa, según explicaron, ha propuesto abrir, a partir del póximo martes, una ronda de negociaciones con los representantes de los trabajadores para acordar los términos del expediente de extinción y el cese de actividad de la planta, unas negociaciones que según estas mismas fuentes sindicales “encararemos con la determinación de defender un matadero y sala de despiece puntero en Lleida, que debe dar cobertura al sacrificio, manipulación y comercialización de la producción agrícola de Lleida y Catalunya con una plantilla que debe seguir con sus empleos”. Asimismo, desde el comité, se reiteró que “nos tememos que Sada quiere vender la planta de Lleida limpia de trabajadores, y no lo aceptaremos”.