SUCESOS
Detenido en Lleida por una estafa de 778.637 € de falsos bancarios
Simulaban ser empleados de banca para hacerse con el dinero de las víctimas. La Policía Nacional ha arrestado a 11 personas y hay 273 afectados

Imagen de artículos y dinero decomisado por los investigadores. - POLICÍA NACIONAL
La Policía Nacional ha detenido a once personas, una de ellas en Lleida, acusadas de formar parte de una supuesta organización dedicada a estafas con la técnica del falso empleado de banca, que habría generado un perjuicio económico de 778.637 euros a 273 personas. Los agentes han interceptado criptoactivos, casi 30.000 euros, terminales telefónicos, joyas y relojes de alta gama.
La investigación empezó a principios de año cuando se detectó a una supuesta organización que habría cometido decenas de estafas bajo la técnica de phising del falso empleado de banca. Los investigados disponían de una amplia base de datos de clientes con los que contactaban telefónicamente, generando un clima de confianza para advertirlos de la detección de movimientos fraudulentos en sus cuentas bancarias. A continuación, les solicitaban las claves de operaciones para, supuestamente, bloquear estos movimientos, cuando en realidad lo que querían conseguir era autorizar movimientos de efectivo a su favor. Estos movimientos se traducían en transferencias, movimientos en plataformas de intercambio de dinero instantáneo y compras de tecnología y de criptomonedas.
Los estafadores utilizaban numerosos teléfonos móviles que iban intercambiando periódicamente como medida de seguridad para no ser identificados. Durante la investigación se han contado un total de 55. Además, detectaron que aprovechaban periodos de residencia en hoteles para llevar a cabo las estafas. Se registraban con documentación sustraída a terceras personas y utilizaban redes wifi no vinculadas a sus identidades. En una primera fase, en Cádiz y Sabadell, detuvieron a tres de los cuatro cabecilla. Hasta entonces había detectado 111 víctimas pero, tras los registros y junto con el análisis de los dispositivos, se pudo descubrir un total de 273 víctimas, a las que les habrían causado un perjuicio económico de más de 778.637 euros. Posteriormente, se llevó a cabo una segunda fase que se saldó con otros ocho detenidos, uno en Lleida y siete en Alacant, que presuntamente formaban parte de una amplia red de mulas bancarias que utilizaban para recibir el dinero defraudado (ver desglose).
El arrestado en Ponent sería uno de los captadores del entramado
El arrestado en Lleida sería uno de los captadores o droppers, según el argot policial, y su misión era la de captar a personas que estén dispuestas, a cambio de una contraprestación económica, a titularizar líneas telefónicas y poner a disposición de la organización sus cuentas bancarias para recibir en ellas el dinero procedente de las estafas cometidas. También se les pedía utilizar sus datos personales para pedir y después recoger pedidos online. En algunas ocasiones se pudo constatar que habrían recurrido a la coacción para lograr que alguna de sus mulas accediera a retirar dinero ilícito de una de sus cuentas. Practicaron un total de seis, uno en Lleida y cinco en Alacant, en los que se intervinieron más de 15.000 euros, escopetas, munición y artículos de lujo, entre otros. Les imputan los delitos de pertenencia a grupo criminal, estafa, detención ilegal y coacciones.