ECONOMÍA
Barrio rico, barrio pobre
Ciutat Jardí, Zona Alta, Camp d’Esports y Fleming se mantienen como los que tienen la mayor renta media bruta por habitante y la del primero dobla a la mayoría. En el otro extremo se sitúan los de Mariola y Universitat, por detrás de Balàfia y Pardinyes

Imagen de archivo de una vista aérea de Lleida donde se ven zonas de Cappont, el Centro Histórico, Clot, Zona Alta, Noguerola y Balàfia. - ÒSCAR MIRÓN
La Agencia Tributaria publicó el miércoles las rentas brutas medias por distritos de Lleida de 2023. Unos datos que reflejan la idiosincrasia de cada barrio y la diferencia de perfiles socioeconómicos que conviven en la ciudad. Prueba de ello es que la zona más rica, Ciutat Jardí, con una media de 59.063 euros por cápita y 1.965 contribuyentes, registró más del doble de ingresos medios que el más pobre, el que aglutina los barrios de Mariola y Universitat y parte de Joc de la Bola, con 28.803 euros y 8.891 tributarios, más de cuatro veces la población de Ciutat Jardí. Otro de los distritos que también se sitúa por encima de la media es el de Zona Alta, Camp d’Esports y Fleming, con 38.123 euros y 6.861 declarantes, mientras que el resto se mantienen en una horquilla que va desde los 32.245 euros (Horta y otros puntos como Sucs, Llívia y Raimat, con 7.187 contribuyentes) a los 29.026 € (Balàfia y Pardinyes, con 16.574 declarantes). Asimismo, la zona con más contribuyentes es la que incluye los barrios de La Bordeta, Els Mangraners y Cappont, con 18.109 personas que tienen una renta bruta media de 31.496 euros. Se trata de la que más se aproxima a la media global de la ciudad, que se sitúa en los 31.697 euros, con un total 79.001 contribuyentes.
En cuanto al ranking de la ciudad, Ciutat Jardí y Zona Alta-Camp d’Esports-Fleming se mantienen en lo más alto igual que en el ejercicio anterior, 2022, seguidos de l’Horta; Clot-Príncep de Viana; La Bordeta-Els Mangraners-Cappont; y Seu Vella-Instituts. Donde sí hay cambios es en la zona baja, ya que Joc de la Bola-Mariola-Universitat ha pasado de la séptima a la décima posición en un año, intercambiando el puesto con Príncep de Viana-Clot-Magdalena-Centre Històric, que aumentó su renta en un 4,8% respecto el 2022. También se permutaron sus puestos Rambla Ferran-Estació, que ha pasado de la novena a la octava posición, con Balàfia-Pardinyes, que ahora son novenos.
Para Rafael Allepuz, economista y director de Càritas Lleida, los datos de la Agencia Tributaria “hay que tenerlos en cuenta, pero son muy variables y agrupan distritos que solo están basados en una segregación territorial”. Sin embargo, más allá de las fronteras de los barrios, Allepuz considera que “el problema que muestran estos datos es que hay una cronificación de las clases bajas que no pueden ascender socialmente y para revertir esta situación solo hay una fórmula: invertir más en educación a todos los niveles, ya que es el verdadero ascensor social”. Por desgracia, advierte que “las corrientes políticas que ahora están en auge y de moda no abogan, por esto, sino todo lo contrario”.