ALEMANIA
Merz evita el desastre y es nombrado nuevo canciller
El candidato conservador tuvo que esperar a la segunda votación. Varios miembros de la propia coalición votaron en contra

Friedrich Merz jura ante Julia Klöckner como nuevo canciller. - EFE/EPA/CLEMENS BILAN
Friedrich Merz fue nombrado ayer nuevo canciller del gobierno alemán. Después de perder en la primera votación, el candidato de la CDU consiguió el apoyo necesario para ganar por la tarde y gobernará, como anunciaron en abril, en coalición con el Partido Socialdemócrata (SPD) y la Unión Social Cristiana de Baviera (CSU).
Saltó la sorpresa en el Bundestag durante la sesión parlamentaria de la mañana cuando Merz se quedó a seis votos de lograr la mayoría absoluta, necesaria en las dos primeras votaciones, para ser elegido canciller. Merz recibió 310 votos, en lugar de los 316 necesarios -el Bundestag tiene 630 diputados- y de los 328 esperados -la suma total de diputados de la CDU/CSU y el SPD-, por lo que fueron miembros de la propia coalición quienes votaron en contra. Este revés ha trastocó el resto del orden del día, previsto para acabar a las dos de la tarde, que incluía el juramento del canciller, el anuncio de la formación del Gobierno Federal y el juramento de los ministros.
Tras el fracaso en su primer intento, se esperaba que la segunda votación se celebrara el próximo martes, ya que la ley da un plazo de catorce días. Finalmente se realizó una segunda votación por la tarde, en la que esta vez sí, el candidato democristiano alcanzó la mayoría absoluta con 325 votos y fue nombrado canciller por el presidente alemán Frank-Walter Steinmeier.
Merz, de 69 años, evitó así el desastre político a la vez que el desplome de la bolsa alemana, que a causa del fracaso de la primera votación bajó casi un 2% y provocó gran preocupación. Sin embargo, Merz no eludió las críticas de la formación ultraderechista Alternativa por Alemania (AfD), que a través de su colíder Alice Weidel reclamó nuevas elecciones en vista de la fragilidad de la gran coalición germana. El partido sigue siendo noticia en estos últimos días por su posible ilegalización, que queda en el aire con el nombramiento de Alexander Dobrindt, escéptico con la decisión, como nuevo ministro del interior.