CONFLICTO
Netanyahu planea controlar Gaza y expulsar a Hamás pero dice no querer gobernarla
La milicia islamista asegura que el presidente israelí quiere “sacrificar” a los rehenes cautivos

Benjamin Netanyahu junto al ministro de Defensa y el jefe del Ejército. - EUROPA PRESS
El gabinete de seguridad israelí se reunió ayer por la tarde con el primer ministro, Benjamin Netanyahu, a la cabeza para debatir sobre una posible invasión total de la Franja de Gaza. Según el periódico israelí Haaretz, entre los asistentes se encontraban tres exrehenes en Gaza que fueron liberados en los anteriores acuerdos firmados entre Israel y Hamás.
Netanyahu confirmó su intención de tomar el control de Gaza para tener “un perímetro de seguridad”, aunque aseguró que no quiere gobernarla ni anexionarla. “Queremos expulsar a Hamás de allí, permitir la liberación de la población en Gaza y pasar a un gobierno civil”. Israel controla en este momento aproximadamente un 75% de la Franja, y la ofensiva para controlar todo el territorio podría durar unos cinco meses, según fuentes israelíes.
Por su parte, el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) manifestó que las declaraciones de Netanyahu “revelan los motivos de su retirada de las negociaciones”, y aseguró que el líder israelí planea “sacrificar a los rehenes” cautivos por la milicia en Gaza.
La situación de los prisioneros provocó protestas multitudinarias frente la oficina de Netanyahu durante la reunión. El Gobierno israelí, además, cuenta con la oposición del jefe del Ejército, Eyal Zamir, que afirmó que la cúpula militar seguirá expresando su postura “sin temor”, así como “de manera objetiva, independiente y profesional” tras las críticas vertidas en su contra por su rechazo a la posible ocupación de la Franja, que pondría en peligro a los rehenes.
Mientras, la situación en Gaza sigue siendo dramática. Las autoridades del enclave informaron de la muerte de 98 personas el miércoles a causa de los ataques israelíes, 51 de las cuales mientras buscaban ayuda humanitaria. En dos meses, la cifra de muertos en esa circunstancia llega a 763.
Para paliar la hambruna en la Franja, el Gobierno de España ha destinado 20 millones de euros a ayuda humanitaria en la región en 2025, y supera los 76 millones desde el inicio de la ofensiva israelí en 2023, según informó el ministerio de Asuntos Exteriores.
La Comisión Europea, por su parte, reconoció que el acceso humanitario en Gaza no llega a los niveles acordados con el Gobierno israelí, pese a que admitió “avances parciales”.
La portavoz de Exteriores de la UE, Annita Hipper, señaló que la posición del bloque es que la crisis en la Franja es “insostenible” y que la muerte de civiles es “indefendible”, pero evitó referirse a la ofensiva israelí sobre Gaza como un genocidio, después de que su vicepresidenta ejecutiva Teresa Ribera asegurara en una entrevista que la situación, “si no es genocidio, se parece mucho”.