POLÍTICA
Vilaplana dice que Mazón no tenía prisa y atendía el móvil
Asegura que durante la comida recibió numerosas llamadas y mensajes. Niega haberle enseñado un vídeo de Utiel

La periodista Maribel Vilaplana a su llegada ayer a los Juzgados de Catarroja. - EUROPA PRESS
La periodista Maribel Vilaplana, que estuvo comiendo en el restaurante El Ventorro con el ya president en funciones de la Generalitat Valenciana, Carlos Mazón, durante el día de la dana, afirmó ayer ante la jueza de Catarroja que investiga la gestión de la catástrofe que, durante la comida de trabajo que mantuvo ese día con él, este no mostraba “prisa” ni preocupación y que, de hecho, se despidieron a las 18.45 horas, cuando ya había fallecidos por la riada, hablando de fútbol. También aseguró que Mazón estaba comunicado y que “atendía su teléfono móvil”, “hablaba y también escribía”. “Yo tengo la percepción de escucharle poco hablar. Él estaría más escuchando que hablando”, señaló, para agregar que no le comentaba “nada” de las conversaciones que mantenía. “Nunca me comenta nada ni oigo palabras como dana, Cecopi o lluvias”, apostilló. Preguntada por un vídeo que recibió en su móvil sobre las 17.30 horas en el que aparecía Utiel inundado, la comunicadora indicó que lo recibió en un chat familiar, que se trataba de un link que le pasó su exmarido, pero que no lo abrió, por lo que descartó que Mazón conociera de su existencia. También señaló que la actitud de Mazón durante la comida era “distendida” y que no percibió “prisa” en él. De hecho, explicó que cuando salieron del restaurante y se dirigieron al parking, ella, que trabaja como consejera para el Levante UD, le pidió que fuera a ver un partido de fútbol, un derbi contra el Elche.
La periodista no aportó el tíquet del aparcamiento de aquella jornada, tal y como le requirió la jueza instructora, al asegurar que no lo conservaba, aunque dará la matrícula de su coche para que se pueda reclamar ese documento a la empresa.
A la puerta del juzgado, la comunicadora fue recibida por los familiares de las víctimas de la riada, que le pidieron que contara toda la verdad.