El Lleida logra un buen punto en el campo del Espanyol B

El Lleida Esportiu consiguió arrancar un punto (1-1) de la Ciutat Esportiva Dani Jarque, después de un horroroso primer tiempo en el que estuvo siempre a merced de un Espanyol B que, más veloz, vertical y agresivo que los de Albadalejo, pudo sentenciar de no ser por las acciones de Pau Torres y la falta de acierto de los locales, que tuvieron en Doncel, el exjugador azul –ayer de amarillo–, a su mejor hombre. Marcó el gol y llevó de cabeza a la defensa leridana, sobre todo con sus desbordes por la banda derecha.

Sin embargo, tras el descanso, el Lleida supo reaccionar. La entrada del canterano Alpha revolucionó al equipo y el gol de Albístegui estableció una igualada que al final se antojó justa.

El Lleida salió dormido al campoy nunca supo reaccionar en los primeros 45 minutos. Pedrosa (12’) y Campuzano (13’) tuvieron el gol en sus botas pero el centro del primero no encontró rematador y el remate del segundo fue bien detenido por Pau Torres, el héroe de los primeros 45 minutos que, sin embargo, no logró detener el 1-0 tras un duro remate de Doncel ante el que no tuvo opción. Precisamente, el ex del Lleida fue el protagonista de la primera parte. Tuvo el 2-0 en una gran jugada personal, regateando contrarios (27’) pero se entretuvo demasiado en el área y aún protagonizó un espectacular remate de volea, que salió rozando el larguero (36’), mientras que Pau Torres evitó el peligro con dos salidas consecutivas ante Soria (34’ y 35’). El Lleida, por su parte, no remató ni una sola vez en este periodo, ni dentro ni fuera. Lo más parecido a un remate fue un centro de Ardiles (32’) tras una salida en falso de Edu Frías, que fue despejado de cabeza por Lluis en el área pequeña.

Sin embargo las cosas cambiaron tras el descanso. Albadalejo dejó en el vestaurio a Artiles y dió paso al canterano Alpha que, él solito, cambió el rumbo de partido con su velocidad y atrevimiento. El Lleida comenzó a llegar más ante un Espanyol que acusaba el fuerte ritmo de la primera mitad. Así rápidamente llegó el empate (1-1). Fue tras una falta que sacó Marc Martínez y Albístegui, en el rechace, remató en semifallo sorprendiendo al portero local (55’). A partir de ahí el Lleida se vino arriba y buscó la victoria con decisión. Ésta pudo llegar en un buen cabezazo de Tano Bonnín (60’) en otra falta favorable al Lleida, pero el portero blanquiazul, Frías, despejó con seguridad. El Espanyol pareció despertar con este aviso del Lleida, pero continuó incurriendo en constantes fueras de juego (nueve a lo largo de los 90 minutos) y prácticamente no tuvo opciones, salvo en dos remates de Campuzano (64’) y Pedrosa (75’). Al final debutó Bojan Radulovic (83’), que pudo provocar un penalti de César Soriano (89’) que el árbitro no apreció como tal.