La renovación de la Cámara

Las cámaras de comercio son históricamente la entidad que representa los intereses de las industrias, los comercios y las empresas en general con una distribución ramificada por todo el país, heredera de los viejos gremios, que presta servicios y asesoría de todo tipo, desde el marketing hasta al arbitraje pasando sobre todo por el fomento de la exportación. Aunque la afiliación a estas entidades dejó de ser obligatoria desde la reforma de 2011, las cámaras han mantenido un papel decisivo, compitiendo a veces y conviviendo también con las organizaciones patronales, tanto en lo que afecta a la representación del empresariado como en la dinamización de la vida económica y hasta como un elemento decisivo en la interlocución con los diferentes gobiernos en todo lo relacionado con el comercio y la industria. Ahora han entrado en pleno proceso electoral con un procedimiento largo y complejo en que primero se eligen a los representantes de los diferentes sectores y después de las votaciones una vez constituido el pleno de la Cámara se vota al que la preside en un proceso que también se alargará hasta mayo. Habitualmente, había consenso en las candidaturas de Lleida y de hecho el presidente saliente, Joan Simó, llevaba 28 años en el cargo que compatibilizó durante algunos con la presidencia de la patronal, pero en estas elecciones solo se mantiene el consenso en la cámara de Tàrrega con un candidato por vocalía, con Carles Giribet como aspirante a suceder a Delfí Robinat en la presidencia. En cambio, en la Cámara de Lleida, hay récord de candidaturas con 74 presentados a 28 vocalías, con especial incidencia en el sector del comercio, donde hay 20 candidatos para 6 vocalías, y también en la de Barcelona se anuncia una pugna inédita con tres aspirantes a suceder al actual presidente, Miquel Valls, y alguna candidatura decididamente independentista frente a otra con un perfil más continuista. En el caso de Lleida no se ha trasladado un enfrentamiento político tan directo, pero sí hay una pugna entre las empresas más grandes y las pequeñas y medianas, es decir entre las dos patronales, COELL y Pimec, que se refleja especialmente en las vocalías del comercio. De momento, hay un candidato a la presidencia, Jaume Saltó, que también es el máximo dirigente de Pimec en Lleida, pero es previsible que COELL, vinculada a Foment del Treball, también presente a alguno de sus vicepresidentes en esta pugna económica.