Girona se merece unas excusas

Escribimos esto sin saber qué pasará en el Girona-Real Madrid de esta tarde, pero lo más que probable es que no pase nada más allá de lo estrictamente deportivo, entre otras muchas razones porque el Girona y su afición son los primeros interesados en que no ocurra. Por eso se nos han puesto a diario los pelos como escarpias al ver la vergonzosa persecución de la que ha sido objeto Girona, la ciudad, el club y sus aficionados por parte de los (ir)responsables de los espacios deportivos de Antena 3, Cuatro y La Sexta, que han dibujado el desplazamiento blanco a Montilivi como si se viajase a una zona bélica de alto riesgo. Desde pedir la suspensión, vaticinar agresiones, pedir protección policial y presentar testimonios de aficionados (adecuadamente seleccionados y/o editados), todo ha sido poco para crear un clima de peligro inexistente, adecuadamente pespunteado con kyrons alarmistas y música de fondo de película de terror. Buscan la violencia antes de que se produzca y luego, si pasase, serían los primeros en rasgarse las vestiduras. La verdad, Girona se merece una disculpa.