Las personas con VIH podrán ser donantes tras casi 40 años de veto

La orden ministerial de 1987 que excluía a las personas con VIH como donantes de órganos ha sido derogada y la resolución se publicó ayer en el BOE. Esta nueva normativa permite a las personas con VIH ser donantes a personas afectadas por la infección. Según un comunicado de las fundaciones Antisida de Lleida y Renal Jame Arnó, “el Ministerio de Sanidad pone fin a una exclusión injustificada y da respuesta a una reivindicación histórica de colectivos y profesionales de la salud”. Según datos de la Organización Nacional de Trasplantes, 65 personas con VIH que murieron en la década pasada podrían haber sido donantes, permitiendo hasta 165 trasplantes. Con esta nueva realidad, unos 50 pacientes con VIH que esperan un trasplante anualmente tendrán acceso a nuevas opciones terapéuticas. En el comunicado celebran esta decisión como “un logro absolutamente necesario”, fruto de “una reivindicación histórica”. “Más allá del avance médico, este gesto representa un reconocimiento institucional del valor y la humanidad de las personas con VIH”, explican, que ahora “podrán ser donantes si así lo desean, participando activamente en la cadena de solidaridad que representa el sistema de trasplantes”, añaden. “Al ser una enfermedad crónica tiene otras patologías asociadas a la infección que requieren un trasplante y esto permite tener más posibilidades de encontrar un donante para la persona, es una noticia excelente”, explica a SEGRE, Marta Melgosa, directora de la Fundació Antisida de Lleida. La nueva norma trae también nuevas obligaciones: “tenemos que dar formaciones para dar a conocer esta posibilidad y sensibilizar a las personas con VIH para que sean donantes”, subraya Melgosa.