MUNICIPIOS LITIGIOS
El Tribunal de Cuentas archiva la investigación sobre Rialp
No aprecia indicios de responsabilidad contable || Tras diligencias a raíz de una denuncia que el alcalde atribuye a la oposición
Imagen reciente de Gerard Sabarich, alcalde de Rialp.
El Tribunal de Cuentas ha dado carpetazo a la investigación que inició meses atrás sobre la gestión económica del ayuntamiento de Rialp, y que el alcalde, Gerard Sabarich (PDeCAT), atribuyó a una denuncia del grupo municipal de ERC, en la oposición. En una resolución del pasado 6 de abril, el órgano fiscalizador del Estado archiva las diligencias al concluir que no existen indicios de responsabilidad contable por parte del equipo de gobierno.
La decisión del Tribunal de Cuentas llega después de que, el pasado 30 de marzo, la Fiscalía emitiera un informe para el órgano fiscalizador según el cual ninguna de las presuntas irregularidades denunciadas “reviste el carácter de un alcance” contable. Basándose en estas conclusiones, la investigación se ha cerrado cuando estaba todavía en fase de diligencias preliminares, al considerar que “no existe supuesto alguno de responsabilidad contable”.
También ha archivado en el último año 3 denuncias anónimas contra el alcalde, Gerard Sabarich
Cabe recordar que, en los últimos meses, la oposición en el consistorio de Rialp había cuestionado públicamente “pagos a trabajadores municipales fuera de nómina y sin liquidar IRPF”, dietas y compensaciones de alcaldía, e “ingresos a cuentas de particulares sin justificar”, entre otras cuestiones relacionadas con la gestión de los fondos del consistorio.
El archivo de la investigación del Tribunal de Cuentas llega después de que, en el último año, la Fiscalía de Lleida haya archivado otras tres investigaciones que abrió a raíz de denuncias anónimas sobre supuestas irregularidades en el uso de fondos públicos por parte del alcalde. En ninguno de estos casos el ministerio público apreció indicios de delito en la actuación del primer edil.
Por su parte, Sabarich calificó las sucesivas denuncias ante la Fiscalía y el Tribunal de Cuentas contra él y su gestión al frente del consistorio de Rialp como una “persecución política”, y expresó su satisfacción porque hayan sido archivadas. “La realidad acaba por imponerse y salir a la luz”, valoró, tras un largo periodo de tiempo en el que lamentó haber sufrido “ataques e insultos injustificados que no solo me han afectado a mi, sino también al resto del equipo de gobierno y al secretario municipal”.
