La autovía A-14 entre Lleida y Almenar, infrautilizada por el tráfico pesado

Un mes después de la inauguración del tramo de la A-14 entre Lleida y Rosselló que permitió dar salida al trayecto a ninguna parte entre esta última población y Almenar, el tráfico de camiones por la nueva autovía es imperceptible.

Los 16 kilómetros hasta la salida en dirección a Alfarràs están infrautilizados por vehículos pesados, una apreciación que confirma la responsable del sector de los transportistas en Lleida, Silvia Llobet. Según Llobet, los camioneros siguen utilizando la antigua N-230 a excepción de los que hacen largos trayectos que tienen que enlazar con la A-2 en dirección a Fraga o Zaragoza.

Los que continúan usando la N-230 y sus casi veinte rotondas son camiones que cargan fruta y pienso (cereal) y van de las explotaciones de esta zona del Segrià a las cámaras, en el caso de la fruta, y hacia Francia, en caso del cereal.

Llobet remarcó que son cortos recorridos por lo que no merece la pena desviarse por la autovía A-14, que solo tendrá sentido cuando enlace con Huesca o, por lo menos, esté hecho el tramo entre Almenar y Alfarràs, señaló Llobet. Por el momento, son muy pocos los vehículos pesados que se ven por esta carretera.

En este mismo sentido se manifestó la alcaldesa de Almenar, Teresa Malla, que remarcó que los camiones siguen circulando por la travesía de la N-230, sobre todo durante el verano con la campaña de recolección de la fruta.

Malla indicó que el ayuntamiento ha puesto señales para que los camines no se confundan en el desvió y se metan en el centro urbano. “Hemos puesto algunas señales y pondremos más para que no haya confusiones”, remarcó. No obstante, la autovía recorta de media hora a diez minutos el tiempo de la duración del viaje entre Lleida y Almenar.