El ladrón multirreincidente acusado de disparar a un camionero en Vilanova de la Barca dice que iba drogado y no recuerda nada

El ladrón multirreincidente acusado de disparar a un camionero en Vilanova de la Barca en enero de 2020, ha declarado que iba drogado y que “no recuerda nada”. Se trata de un vecino del Vallès Occidental de 39 años que sólo ha repuesto las preguntas de la defensa en el juicio que ha empezado este lunes en la Audiencia de Lleida y se alargará hasta el viernes. La Fiscalía le pide 28 años y medio de prisión por asesinato en grado de tentativa, varios robos con fuerza, tenencia ilícita de armas, e intimidación y amenazas. Está acusado de encadenar una serie de hechos delictivos iniciados en Barcelona después de robar una furgoneta y que acabaron en les Borges Blanques donde fue detenido por la policía.

Según fiscalía, el acusado empezó su periplo delictivo el 15 de enero de 2020 cuando se llevó una furgoneta con las llaves puestas en Barcelona. El 25 de enero de 2020 se dirigió con este vehículo hacia Sant Cugat del Vallès donde puso cerca de 30 euros de combustible sin pagar. Posteriormente volvió a poner gasolina en una gasolinera de Molins de Rei y se marchó sin abonar más de 70 euros.

La madrugada del 26 al 27 de enero fue con la misma furgoneta robada hacia Vilanova de la Barca e intentó robar en dos empresas a la altura de la C-14. Lo intentó disparando un tiro a la cerradura y no lo consiguió. Después, según el escrito del ministerio público, se acercó a un vehículo que estaba parado cerca de las empresas en cuestión, y se llevó un teléfono móvil. Entonces, se dirigió hacia una furgoneta de una empresa de transportes que estaba a la altura del kilómetro 15 de la C-13 y rompió los cristales pero no se llevó nada.

También se le acusa de ir después a una empresa de cierres en la calle Horta de Vilanova de la Barca, forzar la puerta de acceso y llevarse herramientas como sierras, martillos o generadores. Así hasta 16 objetos que fueron recuperados. También intentó acceder a un almacén de la calle Central estampando la furgoneta en la puerta pero no lo llegó a conseguir. Después fue a otra empresa donde sí que consiguió entrar después de estamparse contra la puerta. En el almacén había un vehículo y, según la fiscalía, robó varios objetos, entre los cuales un teléfono. Entonces, el ladrón fue sorprendido y se marchó deprisa.

Fue entonces cuando se dirigió hacia la calle Portal del mismo municipio y forzó otro vehículo propiedad de una empresa rompiendo puertas y cristales para no llevarse nada. En la misma calle también forzó otro vehículo y no consiguió nada y también un camión, con el mismo resultado.

Entonces, en la plaza del Portal, el ladrón, según el escrito de acusación, con la cara y la cabeza cubiertoss con una pañuelo y una capucha entró en un camión. Mientras intentaba robar, fue sorprendido por el camionero y bajó espalda escondiéndose el revólver que llevaba. Acto seguido, se giró de forma rápida e imprevista y disparó dos tiros a bocajarro que impactaron contra el abdomen y la zona escapular izquierda de la víctima, que intentó huir pero se cayó. En este momento, según la fiscalía, el acusado le volvió a disparar, esta vez en la pierna, con una arma de la cual ni tenía licencia ni tampoco estaba registrada. La víctima estuvo ingresada en el UCI durante más de dos semanas y sufrió estrés posttraumático.

El acusado huyó con la furgoneta robada y fue por un camino desde Vilanova de la Barca hasta Alcoletge. Durante el trayecto chocó con la pared de una empresa, abandonó el vehículo y se dirigió hacia el patio de una empresa de la localidad donde robó otra furgoneta que tenía las puertas abiertas y las llaves puestas. Acto seguido, se dirigió hacia la plaza Europa d'Alcoletge donde entró en un camión. Esta vez también fue visto por el chófer, a quien apuntó con la pistola y amenazó con que le dispararía.

Los dos se acabaron marchando y el acusado subió a la furgoneta para ir una gasolinera de Lleida, al barrio de la Bordeta. Allí también sacó la pistola y apuntó al dependiente. Consiguió llevarse más de 700 euros de la caja registradora así como también su mochila. En este establecimiento el acusado, al marcharse, disparó un tiro que impactó contra un objeto. Con la segunda furgoneta robada, el acusado se dirigió hasta una gasolinera de les Borges Blanques donde fue detenido por la policía.

La fiscalía le pide 8 años de prisión por el delito continuado de hurto en concurso con robo con fuerza continuado con el agravante de reincidencia; 12 años de prisión más por el delito de asesinato en grado de tentativa, además de la prohibición de comunicarse o acercarse a menos de un kilómetro de la víctima durante 10 años; 7 años y medio de prisión por un delito de hurto en concurso con robo con intimidación y amenazas, y 1 año de prisión por tenencia ilícita de armas.