Hasta 750 euros al mes por un piso de 50 metros cuadrados y 3.650 por una casa en Bellver de Cerdanya

El mercado inmobiliario en Bellver de Cerdanya refleja una realidad preocupante con alquileres que alcanzan los 750 euros mensuales por pisos de apenas 50 metros cuadrados, según los datos disponibles en portales como Idealista. La situación evidencia una oferta limitada, con solo siete inmuebles disponibles, mientras que los chalés y casas se ofertan entre 1.400 y 3.650 euros mensuales.

En Puigcerdà, capital de la comarca, la situación no mejora: los pisos rondan los 900 euros al mes (975 euros por una vivienda de 95 metros) y las casas oscilan entre 1.600 y 2.500 euros mensuales. Paralelamente, la Cerdanya cuenta con 1.282 viviendas de uso turístico (HUTs), de las cuales 250 están en la provincia de Lleida, mientras que en todo el Pirineo existen 4.006 viviendas de este tipo, sumando más de 22.000 plazas disponibles.

Un reciente estudio presentado en las jornadas de Esterri d'Àneu estableció que existen 4.719 viviendas turísticas en todo el Pirineo, con un precio medio de alquiler de 538,25 euros según datos de 2022. Lo más alarmante es que el conjunto de estos HUTs podría dar cobijo al 80% de la población de la Val d'Aran, evidenciando el desequilibrio entre vivienda turística y residencial permanente.

Segundas residencias infrautilizadas y protestas vecinales

El incremento de precios ha generado un creciente descontento entre los habitantes locales, quienes encuentran cada vez más difícil permanecer en sus lugares de origen debido a costes inasumibles. Este malestar ha cristalizado en movimientos sociales como la plataforma Pirineu Viu, que ha denunciado públicamente que numerosas segundas residencias permanecen ocupadas una media de apenas catorce días al año.

Dicha plataforma promueve diversas medidas para abordar la problemática: regular los precios de los alquileres, aplicar limitaciones estrictas a las viviendas de uso turístico, penalizar fiscalmente a propietarios de terceras y cuartas residencias, y crear incentivos fiscales para quienes recuperen viviendas vacías e impulsen el alquiler social.

Medidas institucionales para frenar la proliferación de pisos turísticos

Tanto ayuntamientos como la Generalitat han comenzado a implementar medidas para contener la expansión de los pisos turísticos, observándose ya un estancamiento en la concesión de nuevas licencias. En la provincia de Lleida, las comarcas con mayor concentración de HUTs son el Valle de Arán (1.710) y la Cerdanya (1.282 en total, con 250 en territorio leridano).

Este fenómeno no es exclusivo del Pirineo. Localidades costeras como Sitges también cuentan con aproximadamente 1.700 viviendas de uso turístico, a pesar de haber suspendido la concesión de nuevas licencias desde 2016, lo que demuestra la magnitud de un problema que afecta a distintas zonas turísticas de España.