Balaguer condena la agresión a un maestro y exige educadores sociales
Unas 50 personas protestan ante el colegio Àngel Guimerà y piden más recursos

Maestros y miembros de equipos directivos de las seis escuelas de Balaguer ayer durante la movilización delante del colegio. - E. FARNELL
Medio centenar de personas se concentraron ayer ante el colegio público Àngel Guimerà de Balaguer para condenar la agresión a un maestro por parte del padre de un alumno el pasado lunes. Docentes y miembros de la comunidad educativa de la capital de la Noguera pidieron más recursos, educadores sociales y técnicos de integración social.
Medio centenar de personas se concentraron ayer por la mañana delante del colegio público Àngel Guimerà de Balaguer, antes de iniciar las clases, para denunciar la agresión que sufrió el pasado lunes un profesor por parte del padre de un estudiante. A la protesta se sumaron docentes, equipos directivos de las otras seis escuelas de la capital de la Noguera y representantes de la Paeria. Los manifestantes exhibieron pancartas en las que se podía leer Som mestres, no policíes, Prou violencia a l’escola, La por no educa, o Cap agressió verbal ni física. Albert Font-Tarrés, vicepresidente del Colegio de Educadores Sociales, denunció a las puertas del colegio que “hay una falta de educadores sociales en las escuelas catalanas”, una situación que, según advirtió, afecta especialmente a las escuelas catalogadas de máxima complejidad. “Este curso hay menos profesionales de educador social y también faltan otros perfiles como los técnicos de integración social”. Añadió que se trata de una figura clave para garantizar el bienestar, la convivencia y un buen clima escolar, “aspectos esenciales en centros con realidades sociales más vulnerables”. En el caso de Lleida, la situación se ha agravado ya que de contar con siete profesionales distribuidos en siete escuelas, se ha pasado a seis en otros tantos centros. Los seis que han dejado no han cubierto de nuevo la plaza, dijo. Reclamó que la presencia de educadores sociales llegue a todos los centros educativos y no dependa de programas temporales que luego dejan el trabajo interrumpido. Explicó que el curso pasado en algunos centros, como en Balaguer, había tanto educadora social como técnica de integración social. Sin embargo, este curso no se ha cubierto ninguna de estas dos plazas. “La educadora social ya no está y la técnica no se ha podido incorporar por motivos de contratación”, dijo. Catalunya contaba con 85 educadoras sociales el curso pasado, siete de ellas en Ponent (una en Balaguer y seis en Lleida). Este curso se ha pasado a seis en todo Ponent. Además, los profesionales han cambiado de centro, lo que implica reiniciar el trabajo desde cero en cada caso.
Denuncian el recorte de 103 plazas de especialistas sociales este curso
La portavoz del sindicato USTEC-STEs en Lleida, Rosa Aguilà, lamentó la agresión de Balaguer y denunció el recorte de 103 plazas de técnicos y educadores sociales para este curso en Catalunya. “Algo está fallando en los centros e institutos y mucha culpa de ello se debe al recorte por parte de Educación de al menos 103 plazas”, dijo. Añadió que estos profesionales “son imprescindibles”, ya que llevan a cabo un trabajo esencial con las familias y los colegios, especialmente los de “alta complejidad”. Denunció la “falta absoluta de recursos y de implicación del departamento de Educación”, y exigió la revisión de los protocolos ante cualquier agresión, puesto que “no debe ser el maestro de turno el que tenga de denunciar los hechos, debe ser el responsable de Educación en el territorio y se debe proteger al máximo al docente”. Asimismo, apuntó que debe haber un experto en cada centro educativo para dar respuesta al decreto de diversidad e inclusión, que regula la atención educativa del alumnado. Por otra parte, la Intersindical también denunció la agresión y exigió al departamento la contratación de más personal ya que “son imprescindibles” para los colegios.
Educación prevé cubrir la plaza de TIS del centro en dos días
Educación prevé cubrir la plaza de técnico de integración social (TIS) del colegio de Balaguer en dos días. Así lo confirmó el delegado en Lleida, Ruben Mansilla, que explicó que el centro Àngel Guimerà es uno de los pocos de Lleida que tiene una plaza estructural y que cuenta con una bolsa. Añadió que el titular de la plaza está de baja laboral y la persona que cubrió este puesto de trabajo también renunció, y “hasta el momento no se ha encontrado a nadie”. No obstante, confió en que “como máximo” en las próximas 48 horas la plaza esté cubierta. Avanzó que ayer mismo también se cubrió la plaza del docente agredido con carácter de “urgencia”. Añadió que el departamento ha activado todos los protocolos y puesto los recursos necesarios para dar respuesta al conflicto. En cuanto a la figura del educador social aseguró que esta plaza formaba parte de un programa especial que ha finalizado y no está previsto reemplazarlo. El objetivo de Educación es que cada centro educativo tenga una de las dos figuras: TIS o educador social para llegar al máximo de colegios e institutos. El programa constaba de 300 especialistas, de los que 240 eran TIS y 60 educadores sociales.