Los vecinos mejoran un parque de Preixana
Voluntarios dedican una jornada a llevar a cabo actuaciones para arreglar y mantener la zona de la ermita de Montalbà. Es una tradición anual que tiene lugar unos días antes de Pascua

Imagen de grupo de algunos de los voluntarios en la jornada del día 9 de marzo. - AJUNTAMENT DE PREIXANA
Una quincena de vecinos de Preixana dedicaron una jornada voluntariado a mejorar el entorno del parque de la ermita de Montalbà. Se trata de una tradición que se repite cada año y que este 2025 tuvo lugar el pasado 9 de marzo.
El consistorio colabora con la iniciativa aportando los materiales, mientras que los vecinos ponen la mano de obra. En esta ocasión, los trabajos, que se llevaron a cabo a pesar de la amenaza de lluvia, consistieron en arreglar barandillas y acabar de instalar una cuerda grande marcando el camino de las escaleres; podar árboles; decorar algunos troncos con caras para hacer más entretenida la visita a la zona de los más pequeños, y habilitar una isla de contenedores para mejorar el reciclaje en el parque.
El alcalde, Jaume Pané, recordó que la ermita de Montalbà se construyó en 1940 y que, desde entonces, los vecinos han ido realizando diferentes mejoras en la zona de forma altruista hasta conseguir el actual parque. Pané aseguró que, sin esa colaboración desinteresada, no habría sido posible, ya que Preixana es una localidad pequeña y con poco presupuesto. El parque está equipado con mesas y sillas de piedra y barbacoas. También hay una pista para actividades, un espacio de aparcamiento y varias zonas de paseo. Además, hace seis años se habilitó un parking para autocaravanas que ocupa una superficie de unos 2.500 metros cuadrados y cuenta con un punto de luz y conexiones a la red de agua de boca y alcantarillado.
Preixana celebra este año el 85 aniversario de la construcción de la ermita de Montalbà. Precisamente, los días más concurridos del parque de Montalbà son el Lunes de Pascua, cuando muchas familias van allí a comer la Mona y a pasar el día aprovechando que el espacio acoge el Aplec de Montalbà dedicado a las sardanas, uno de los más veteranos de Lleida, y el día siguiente coincidiendo con la celebración de la fiesta de la Virgen de Montalbà.