“Hay ganas de competir”

Yvan Castillo es un profesional del fútbol que el próximo mes de junio podrá hacer, en principio, lo que les ha sido vetado a la gran mayoría de jugadores y técnicos de Segunda división B, volver a competir. Yvan cumple su segunda temporada como entrenador de porteros del Deportivo de A Coruña, especialidad con la que se estrenó en el Lleida Esportiu en la 2012-2013 y donde estuvo dos años, ambos con Toni Seligrat en el banquillo. “Percibo en los jugadores que hay muchas ganas de competir”, explica, celebrando que, al menos en Primera y Segunda, “se pueda hacer justicia a los equipos en el césped y que una competición no acabe en un despacho”, añade.

Yvan espera mantener su buena estrella deportiva, ya que ha disputado cinco play off en siete temporadas: Dos con el Lleida, dos con el Reus –con ascenso a Segunda A en la 2015-16– y un play off a Primera con el Deportivo, club con el que ahora lucha por mantenerse en Segunda A. “Estamos en la lucha. Cuando llegó Fernando Vázquez como entrenador encadenamos nueve victorias y de los cuatro últimos partidos antes del parón ganamos dos”, explica.

Dentro de la fase 2 en la que ya están en Galicia, su equipo lleva tres semanas entrenando y explica que “soy el que tiene más riesgo de lesiones. Como no podemos entrenar en grupo hago trabajo individual con cada uno de los tres porteros, por lo que los golpeos, distribuciones y demás ejercicios que se hacen durante una sesión, yo los multiplico por tres”.

Este leridano de adopción, nacido en 1979 en Móra la Nova, admite que, junto a las ganas por volver a jugar, los jugadores sienten preocupación, no solo por el riesgo de lesiones, también por el de contagiarse el coronavirus. “Habrá vuelos y hoteles donde compartes espacios y también vendrán a Riazor equipos de ciudades que están en fases no tan avanzadas”, explica. “Esta claro que la salud está por encima de todo, pero como yo les digo a los jugadores, que esto es una pandemia mundial y que nosotros también somos sociedad, por lo que no podemos tener más privilegios que los demás. Todos los trabajos son igual de importantes”. Sobre el confinamiento, Yvan Castillo dice que “al principio creo que vino bien. El día a día que llevamos no es sano y se demostró que el mundo se puede parar. Creo que había que parar un poco y reflexionar, pero llega un punto que ya tienes muchas ganas de pisar el verde y de que te toque el sol”.

Sobre la decisión tomada por la RFEF en Segunda B, insiste en que lo más justo es acabar, pero que, si no era posible, “cualquier cosa que hubieran resuelto siempre habría algunos a los que les parecería injusto”. Añade que “al Lleida lo sigo siempre” y reconoce que esta temporada tuvo la alegría del debut de Víctor Vidal. “Cuando yo estaba le daba tecnificación. Algunos decían que era bajito, pero yo replicaba que técnicamente era el mejor de la Escola. Tomamos la decisión correcta”.