El AEM, superado en casa ante el Levante Las Planas

El AEM cayó en casa ante el líder Levante Las Planas (0-2) y tiene muy complicado quedar entre los cinco primeros y, por consiguiente, acceder a la futura Segunda División de grupo único por la vía directa. Todavía quedan opciones de conseguirlo en la última jornada ante el Osasuna en El Sadar el próximo sábado, pero las leridanas ya no dependerán de sí mismas. Aunque las navarras ya no se jugarán nada porque quedaron descartadas ayer de la lucha por el ascenso a Primera, el AEM necesitaría sumar a su victoria por lo menos dos pinchazos en los partidos del Barça B, el Logroño y el Deportivo.

En caso contrario, el martes 31 disputaría un partido en casa contra un equipo del grupo Sur a cara o cruz. En juego, el premio de seguir en la reformada antesala de la élite para el ganador y con el semicastigo para el perdedor de jugar en la nueva Tercera que mantendrá el formato de dos grupos de la actual Segunda. Aunque se le ha complicado sobremanera, había una remota posibilidad de que el AEM se asegurara ayer matemáticamente esta quinta posición, pero no se dio ninguno de los escenarios que lo hubiera propiciado, ya que el Barça B sorprendió al Osasuna y el Deportivo también ganó en su visita al Oviedo.

Una derrota del AEM ante el Levante podía esperarse, por potencial de ambas plantillas y porque las de Sant Joan Despí lo tienen ahora todo de cara para convertirse en nuevo equipo de Primera la próxima semana, pero lo cierto es que en el primer tiempo las leridanas fueron incapaces de frenar la sangría visitante ni de modificar un planteamiento que facilitó que llegaran al área con demasiadas facilidades. Empezando por la superioridad numérica visitante en las bandas y por la estéril doble punta azul que ni siquiera hizo echar de menos a la sancionada Pixu, que hubiera podido hacer bien poco. De ahí que, en el descanso, el marcador de 0-2 pareciera, y más bajo el calor abrasador, ya irremontable.

Y, especialmente, porque pudiera haber sido más amplio si el larguero no hubiera repelido un remate de Yasmin, todavía con 0-0, y si la colegiada hubiera señalado un penalti de Tania sobre Julve.Tras unos diez minutos de intenso acoso sobre el ecuador del primer tiempo, el Levante consiguió adelantarse en una falta colgada al área que Yasmin, demasiado sola, remató a la red de cabeza de forma imparable para Mireya (0-1). Y diez minutos después, Emma Martín se plantó ante Mireya volvió a hacer aguas la defensa del AEM y, tras dos regates, se plantó ante la guardameta para batirla por bajo (0-2). El bagaje ofensivo de un equipo sin rumbo se resumió en un disparo de Alexia desviado en el minuto 6 y en una falta lateral también suya que atrapó Ezquerro.En la segunda parte, al Levante le costó mucho más pisar el área y, en cambio, el AEM pareció dar síntomas de mejora, especialmente cuando, a partir de los cinco minutos, dispuso de tres balones en el área que a punto estuvo Taberner de transformar en gol.

La más clara, sin embargo, la tuvo Alexia, que se adueñó de un balón a la espalda de Júlia Mora y lo mandó al poste. Un gol leridano habría cambiado el guión del partido en esta fase de letargo levantinista, pero, por segunda semana consecutiva, no hubo acierto de cara a portería y, al final, el desgaste físico hizo mella en el equipo. Barbi tuvo que ser sustituida con molestias en el minuto 53, posteriormente tuvo que serlo Andrea y Natalia, que ya entró renqueante de la rodilla tras el penalti que no le pitaron en Zaragoza, también tuvo problemas para acabar el partido.

La factura física fue grande, aunque la anímica también por haber encadenado dos derrotas casi en la orilla de la nueva Segunda División. “Estoy decepcionado, pero no con el equipo. Se ha demostrado una vez más institucionalmente lo que importa el deporte femenino.

Hoy es el Aplec y parecía que jugábamos en el campo del Levante, nuestras jugadoras no han tenido el apoyo que debían tener”. Así de contundente se mostró el presidente del AEM, Carlos Sisteré, lamentando tras el partido la floja entrada que presentó el Recasens en un partido de importancia vital para el equipo, el último en casa de la fase regular. “Nos lo jugamos todo y nos llenamos la boca de fútbol femenino y hemos estado solos”, constató Sisteré.

Por su parte, el técnico Òscar Cobacho, pese a la frustración por la derrota, recordó que el objetivo sigue siendo estar en la nueva Segunda la próxima temporada, ya sea por vía directa o por vía play off. “Hemos visto muy fácil estar entre las cinco primeras más de la mitad de la temporada pero el objetivo no ha cambiado. Lo pelearemos el sábado y, si no, el martes”, dijo Cobacho.

Por su parte, Alexia aseguró que “la tecla era estar más juntas y es algo que nos ha costado de entender en caliente, sabíamos el rival que era y nos ha jugado una mala pasada el calor, el desgaste y las bajas, pero ya pensamos solamente en el Osasuna”. Mireya reconoció que el vestuario acabó “tocado” pero que “queda una final ante Osasuna y vamos a por ello, y si hay otro partido lo lucharemos hasta el final. Somos el AEM”.