Acogidos más de 900 mujeres y menores en pisos de urgencia en Lleida
Gestionados por la asociación Refem desde 2018, con 35 plazas en seis viviendas

Priscilla Belohuby y Adriana Ruiz, en el espacio del Rober de la asociación Refem. - Amado Forrolla
La asociación Refem de Lleida gestiona seis pisos de acogida de urgencia para mujeres víctimas de violencia machista con un total de 35 plazas y por los que desde 2018 han pasado un total de 465 mujeres y 453 menores. “Trabajamos mayoritariamente con víctimas que vienen de fuera de Lleida por protección, ya que tienen un mayor riesgo y es mejor que salgan de su territorio para que empiecen a reconstruir su vida”, explican Adriana Ruiz y Priscilla Belohuby, directora y coordinadora de Refem respectivamente. Consideran que “el sistema no protege lo suficiente para que puedan quedarse en su lugar de residencia y estar tranquilas” y constatan que “rompen con todo” para poder empezar de cero y que estos “factores victimizantes” tienen serias consecuencias sobre todo entre los menores. “La mayoría no saben por qué no pueden vivir en su casa, ni ver a sus amigos y hasta incluso han tenido que dejar su muñeco favorito o su ropa al tener que huir”, destacan. Para minimizar el trauma y abordar con una “mirada infantil” esta situación, Refem editó el cuento La nova casa de la Sara, que incluso comparten con otros recursos de atención de toda Catalunya y que el consell comarcal del Segrià distribuyó entre las escuelas bressol para concienciar. La entidad tiene concertadas cinco plazas para estas viviendas de urgencia, por lo que están operativos todos los días del año las 24 horas del día.
La asociación también gestiona desde este año el proyecto Heura, con cinco plazas, destinado a mujeres que ya han pasado por el proceso de recuperación pero que, con la crisis actual de la vivienda, no pueden acceder a un piso. “Viven juntas, comparten inquietudes y se apoyan entre ellas”, destacan. “No se sienten tan institucionalizadas y tienen su propio espacio”, aseguran las responsables de Refem, además de señalar que cuentan con el apoyo de profesionales. Además del Punt, donde atienden todas las consultas de mujeres e imparten talleres y clases de idiomas, disponen del Rober, donde recogen ropa donada para las mujeres y los niños que lo necesitan. “Es un momento terapéutico para ellas, poder elegir la ropa que necesitan sin tener que quedarse con lo primero que les dan. Es una manera de humanizar un servicio que es básico”, defienden. Actualmente cuentan con cuatro puntos de recogida (más información en www.refem.cat) y destacan que necesitan ropa de tallas grandes, para adolescentes y niños y niñas de entre 8 y 10 años, además de zapatos en buen estado.