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El oro, refugio fiable de los inversores

Un hombre sostiene collares de oro en un local de venta de oro.

Un hombre sostiene collares de oro en un local de venta de oro.EFE

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La onza de oro cotiza actualmente alrededor de los 1.340 dólares y continúa en la zona de máximos anuales al afianzarse como valor “refugio” para los inversores por la incertidumbre que genera la desaceleración económica mundial y la guerra comercial que mantiene Estados Unidos con China.

En épocas de tensiones los inversores buscan cobijo en los mercados de deuda. Por eso la semana pasada, ante el temor a la imposición de aranceles por parte de EEUU a México y de que alcanzaran un acuerdo comercial, el metal llegó en algunos momentos a marcar el máximo anual intradía de 1.348 dólares.

“El oro suele actuar como valor refugio, sobre todo ante este tipo de incertidumbres”, explica el analista Joaquín Robles, del bróker XTB, que considera que la guerra comercial es “el mayor catalizador negativo, el mayor miedo de los inversores a que la economía pueda cambiar el sentido alcista de la última década”.

El pasado 7 de junio la onza de oro subió hasta el máximo anual durante la sesión de 1.348,31 dólares (cerrando en 1.341,06 a un centavo del máximo anual registrado el 19 de febrero) después de ocho jornadas consecutivas al alza. Sin embargo, el pasado lunes giró a la baja y cayó un 1%, hasta 1.328 dólares tras el acuerdo entre EEUU y México para no aumentar los aranceles.

El director de Inversiones y Renta Variable de atl Capital, Ignacio Cantos, considera que esta reacción parece normal, pero advierte que si la guerra comercial se recrudece y no hay acuerdos tras la reunión del G-20 de final de mes en Japón, podría haber nuevas subidas del oro. “Si se aclara (la situación), volvería más a los niveles de los últimos dos o tres años, entre 1.250-1.300 dólares”, vaticina el experto.

Al margen de la posible evolución futura, el metal precioso sigue cotizando en zona de máximos anuales y el jueves la onza se pagaba a 1.337 dólares, un 4,5% más que a comienzos de 2019.

Al temor a un frenazo de la economía global, la baja rentabilidad del mercado de deuda y la guerra comercial, las subidas del oro de las últimas semanas, se explican también, a juicio de los expertos, al cambio de postura de la Reserva Federal de EEUU en su política monetaria por la desaceleración de la economía estadounidense.

Mientras, la revalorización en las últimas semanas de las criptomonedas –el bitcoin subió un 59% en mayo– plantea la duda de si afecta a la cotización del oro, que podría estar usándose también como cobertura para las inversiones. No obstante, los analistas desconfían de esta posibilidad porque creen que el inversor en oro es “mucho más tradicional” y busca un refugio en momentos de incertidumbre, mientras que quienes apuestan por las criptodivisas suelen tener un perfil más especulativo.

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