Huelga de los trabajadores de teleasistencia, que atienden a más de 5.500 mayores

Los trabajadores de Tunstall Televida, que tiene la concesión del servicio municipal de teleasistencia a mayores, iniciaron ayer una huelga indefinida en toda Catalunya para pedir unas condiciones laborales dignas, un aumento de los salarios y la contratación de más personal, ya que los 10 empleados que hay en plantilla deben atender a las más de 5.500 personas mayores que están suscritos a este servicio en la ciudad. El seguimiento de la huelga fue del 100% en Lleida pero no provocó afectaciones importantes, ya que el servicio de atención trabajó con normalidad al considerarse servicios mínimos . Los trabajadores de este servicio, que en Lleida está operativo desde 2013, denunciaron que “cuando empezamos, éramos 12 trabajadores y atendíamos a 1.300 personas. Ahora prestamos servicio a más de 5.500 y somos 10, la situación es insostenible”, dijo Gemma Gómez, auxiliar administrativa de Tunstall Televida en el parque de Gardeny, donde la empresa tiene su sede. “No puede ser que desde 2013 se haya triplicado el número de usuarios del servicio de teleasistencia y la plantilla no haya crecido, hace mucho tiempo que oímos decir al ayuntamiento y a la empresa que mejorarían nuestras condiciones pero, tras años esperando estas promesas y semanas de reuniones sin llegar a ningún acuerdo, decidimos que una huelga indefinida serviría para evidenciar nuestra falta de condiciones laborales”, recalcó Gómez. La plantilla y el sindicato Comisiones Obreras aseguraron que se propuso al ayuntamiento remunicipalizar el servicio. Una propuesta que no tuvo respuesta por parte de la Paeria, aseguraron los trabajadores. Tunstall Televida afirmó por su parte que la dirección de la empresa está intentando llegar a un acuerdo con los trabajadores y los sindicatos para encontrar una solución, mientras la Paeria eludió hacer valoraciones al tratarse de un problema de una empresa privada.

La plantilla actual de Tunstall en Lleida está formada por 3 auxiliares administrativas, 3 coordinadoras de zona encargadas de la atención domiciliária, un técnico y otras 3 personas en la unidad móvil. “Las administrativas hacemos 40 horas de lunes a viernes, los de la unidad móvil hacen unas 300 horas de más al año y no se respetan los turnos de trabajo, ya que el que hace el servicio de tarde también tiene que hacer el de la noche. Solo queremos unas condiciones dignas, nada más”, concluyó Gómez.

“En 2013 atendíamos a 1.300 personas y éramos 12 trabajadores, ahora, a más de 5.500 y solo somos 10”