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Un informe señala que la EMU de Lleida se encuentra en situación legal de disolución desde 2015

El documento encargado por la Empresa Municipal de Urbanismo constata la necesidad de reformular las cuentas de 2018

Una imagen de la reunión del consejo de administración extraordinario de la EMU.

Una imagen de la reunión del consejo de administración extraordinario de la EMU.Ajuntament de Lleida

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El informe pericial contable encargado por la Empresa Municipal de Urbanismo (EMU) de Lleida apunta que la partida por valor de 21,9 millones de euros en lo referente a las 'obras de urbanización acabadas pendientes de repercutir (Plan de la Estación)' no tendría que figurar en el balance contable de la empresa. Esta alteración de la situación patrimonial constata la necesidad de reformular las cuentas de la empresa correspondientes al 2018 con el fin de enmendar los errores (que se originan entre los años 2015 y 2017). En este sentido, el informe señala que la EMU se encontraba en situación legal de disolución en los años 2015, 2016, 2017 y 2018. Eso obliga a la EMU a llevar a cabo una operación para refinanciar la deuda que arrastra para asegurar su continuidad y, en caso de que no acabe siendo viable, la sociedad se podría ver abocada a una situación concursal.

El informe que la EMU encargó en el bufete Ortega Condomines Abogados señala que en la formulación de las cuentas anuales de la empresa del ejercicio 2018 se hace constar "incorrectamente" dentro de la partida 'Existencias' la cuenta 'obras de urbanización acabadas pendientes de repercutir (Plan de la Estación)' por valor de 21,9 millones de euros. Así, el informe constata que este elemento no tendría que figurar en el balance de la empresa de 2018, sino que hay que considerar esta partida como 'activos contingentes' –en función de su naturaleza contable- y, por lo tanto, este derecho teórico de crédito "sólo puede constar en la memoria", la cual forma parte de las cuentas anuales, "pero nunca en el balance", según ha explicado el tercer teniente de alcalde de la Paeria y presidente de la EMU, Sergi Talamonte, después del consejo de administración extraordinario de la empresa, celebrado este lunes.

A la vez, el informe también pone de relieve que la EMU no contabilizó el deterioro del valor con respecto a los costes de urbanización pendientes del Plan de la Estación, en la tasación de los activos de la empresa encargada en 2016. La empresa "deterioró el valor de la partida 'Existencias de terrenos y solares para urbanizar' en 16,3 millones de euros, cuando tenía que ser de 37,6 millones", sumando, por lo tanto, los 21,9 millones que se separó de la valoración inicial de las existencias como 'obras de urbanización acabadas pendientes de repercutir (Plan de la Estación)'.

De esta manera, según el informe, los fondos propios de la EMU eran en 2015 de -333.627 euros y no los 20,9 millones que constan en las cuentas anuales de la empresa. Igualmente, en los años 2016 serían de 164.143,13 euros (respecto de los 21,4 millones que recogen las cuentas del EMU de aquel ejercicio); de 293.144,27 euros, el 2017 (21,6 millones), y en 2018, de 749.654,36 (22 millones, según las cuentas de la EMU de aquel año).

Esta alteración de la situación patrimonial de la empresa hace procedente, por lo tanto, reformulación de las cuentas del 2018, en la cual ya trabaja la EMU, tal como presupuso el presidente del consejo de administración, Sergi Talamonte, motivo por el cual decidió no llevarlos a aprobación en el consejo celebrado en octubre, a la espera de que el informe encargado aclarara la controversia en relación con esta partida en lo referente al Plan de la Estación. Una vez reformulados, después de enmendar los errores que se han detectado (que se originan entre los años 2015 y 2017), las nuevas cuentas se someterán a la aprobación de la Junta General de la EMU.

la EMU, en situación legal de disolución desde 2015

El informe también concluye que la EMU se encontraba en situación legal de disolución durante los años 2015, 2016 y 2017, ya que la aminoración sustancial de su patrimonio neto lo situaba por debajo de la mitad del capital social de la sociedad.

En 2018, la situación técnica ya no era de disolución porque se consideró como participativo y, por lo tanto, patrimonio neto, el crédito de 10,7 millones de euros concedido por la Paeria  en la empresa a diez años y sobre el cual el informe también presenta dudas. Según el trabajo, "el fondo económico de esta operación de préstamo no parece ser el propio de un préstamo participativo", hecho que dejaría también la empresa en2018 en situación legal de disolución.

El informe considera que el préstamo, desde el momento de suscribirlo (en diciembre de 2017), era "inviable" económicamente ya que la EMU sólo podía hacer frente vendiendo solares cada año por un valor de 4 millones de euros hasta 2027, una cifra difícilmente alcanzable si se tienen en cuenta las ventas reales efectuadas por la EMU los últimos ejercicios.

En este sentido, el informe confirma la necesidad de enmendar los errores contables detectados los cuales "alteran la imagen fiel" de la situación patrimonial de laEMU. Sergi Talamonte ha reclamado explicaciones a los alcaldes Àngel Ros y Fèlix Larrosa, así como a la expresidenta de la EMU, Montse Mínguez, sobre los motivos porque se formularon erróneamente las cuentas de los últimos ejercicios de la empresa municipal.

De esta situación deriva el actual endeudamiento (más de 50 millones de euros) a un tipo de interés a medio plazo muy elevado, el cual "provoca un escenario de elevada incertidumbre" con vistas a la viabilidad de la empresa municipal, según Talamonte.

El teniente de alcalde y presidente de la EMU ha explicado que "esta situación nos obliga a materializar en las próximas semanas una operación de refinanciación para intentar salvar la empresa" la cual se encuentra "en una situación muy crítica, tanto desde el punto de vista patrimonila, como desde la vertiente de tesorería a corto plazo", según Talamonte. "Si finalmente, no es viable esta refinanciación con las entidades bancarias, la EMU podría ir a situación concursal", ha advertido. Otras posibles soluciones, que ahora habrá que estudiar, antes de ir a preconcurso de acreedores, pueden pasar por la posibilidad de modificar el capital social o por la capitalización de la sociedad.

Sin embargo, desde el gobierno de la Paeria de ERC, JxCat Lleida y del Común se muestran optimistas en la petición a las entidades financieras acreedoras con el fin de conseguir esta refinanciación que haga viable a la empresa a largo plazo. Al margen que esta operación se acabe materializando, Talamonte ha expuesto el compromiso del equipo de gobierno de "mantener las políticas de vivienda y hacer viable el Plan de la Estación".

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