Un vehículo anfibio retira las algas de la canalización por primera vez en 4 años

Un vehículo anfibio recorre desde ayer el tramo urbano del río Segre retirando macrófitos (algas) para reducir así la población de mosca negra.

Una labor que se prolongará durante las próximas dos semanas y que es la primera vez que se lleva a cabo desde 2017 y que es posible gracias a una subvención de 60.000 euros que la Agència Catalana de l’Aigua ha concedido a la Paeria. De este modo, el vehículo anfibio extrae las algas y las arrastra hasta el Pont Nou, dónde son retiradas y secadas para convertirlas en abono ecológico.

Su extracción es vital para reducir la población de la mosca negra, muy activa este verano, ya que es en estos macrófitos donde estos insectos depositan sus huevos y las larvas las utilizan como refugio.

Además, las algas también dificultan que el agua del Segre fluya con normalidad. Mientras el vehículo anfibio esté retirando las algas, el caudal del río estará regulado y solo circulará el caudal ecológico para facilitar su movimiento.

Además de esta actuación, el ayuntamiento ha instalado 22 cajas que sirvan como refugio de murciélagos por toda la ciudad. Este animal es el principal depredador de la mosca negra y otros insectos como los mosquitos o el mosquito tigre. Paralelamente, una vez al mes se vierte al Segre un producto biológico que impide la proliferación de colonias de mosca negra.

Las moscas negras dejan sus huevos en esas algas y las larvas las utilizan como refugio de los murciélagos

Esta campaña para luchar contra la proliferación de este insecto se desarrolla en uno de los veranos en los que más se ha notado su presencia, especialmente en los barrios de Cappont, Pardinyes y La Bordeta.

Por otro lado, la subvención de 60.000 euros de la Agència Catalana de l’Aigua también servirá para plantar árboles de ribera en la canalización el próximo invierno.