Grandes retrasos en la alta velocidad y sin trenes de Rodalies en Lleida: “llega a pasar un día normal y habría habido overbooking”
El Avant de las 7.05 a Barcelona salió a las 8.10. Colas de afectados que esperaban ser recolocados en otros convoyes

Colas de usuarios afectados por el apagón en Lleida-Pirineus esperando ser reubicados en otros trenes. - LAIA PEDRÓS
El transporte ferroviario reanudó ayer la circulación tras la caótica jornada del lunes, pero acumulando numerosos retrasos, trenes cancelados y sin servicio de Rodalies en toda Lleida. Los primeros afectados fueron los usuarios del Avant de las 7.05 de Lleida-Barcelona, que no salió hasta las 8.10, más de una hora después. Uno de los afectados, Kevin Bruque, que también es miembro de la Plataforma Usuaris Avant Catalunya, detalló que “el tren no llegó hasta las 7.42 y fusionaron el tren de las siete de la mañana con el de las ocho, la verdad que esto llega a pasar un día normal y hubiera sido una barbaridad y habría habido overbooking seguro”. Añadió que “los trabajadores de la estación no tienen ninguna culpa de la situación, pero deberían revisar los protocoles y darles más herramientas para que puedan ayudar mejor”.
El incidente con el Avant de primera hora fue el más destacado en Lleida, pero no el único. Y es que la reanudación de la circulación de la alta velocidad provocó que todos los trenes del corredor Madrid-Lleida-Barcelona circularan con retrasos que iban de los treinta a los noventa minutos. Paralelamente, decenas de personas que se vieron afectados por el apagón del lunes y que no pudieron viajar hicieron cola a lo largo de la mañana en las oficinas de Renfe para ser reubicados en otro tren. “He tenido que pasar la noche en un hotel y me han dado billete para ir a Madrid a las cinco, espero llegar a casa y dejar atrás este martirio”, explicó uno de los afectados.
En cuanto al servicio de Rodalies, no funcionó ninguna de las líneas entre Lleida y Barcelona. Esto provocó que la estación de Tàrrega estuviera desierta. Fueron muy pocos los usuarios que acudieron allí, ya que muchos estaban informados de que el servicio de Rodalies no funcionaba. Los pocos que se presentaron, fueron informados por el personal de la estación de que tenían que buscarse transporte alternativo, y la mayoría fueron a la estación de autobuses. De hecho, el bus que iba a Lleida a las 7.45 horas fue más lleno de lo habitual porque junto a sus usuarios habituales, había muchos de los del tren que tenían que ir a estudiar o trabajar. Por contra, la línea Lleida-La Pobla de Segur de FGC funcionó ayer con total normalidad.