SUCESOS
La muerte del hombre que fue agredido en el barrio de Cappont de Lleida, por una disputa por los perros
La víctima acudió a casa tras la caída y familiares lo llevaron al hospital. Los Mossos buscan al autor de la agresión

Calle Jaume II de Cappont, donde ocurrieron los hechos. - MAGDALENA ALTISENT
Los Mossos d'Esquadra seguían ayer investigando la muerte de un vecino de Cappont de 65 años a raíz de la agresión que sufrió el pasado viernes por parte de un hombre cuando salió a pasear a sus perros en el barrio, como avanzó SEGRE ayer. Los investigadores están recabando indicios y testificales y trabajan en la identificación y localización del autor, que sería un vecino de la zona.
En cuanto a la tesis de lo ocurrido, los Mossos sospechan que la agresión se produjo durante una discusión verbal por los perros de ambos. Al parecer, uno de los implicados los paseaba sin correa lo que habría motivado la disputa. Los hechos tuvieron lugar a las 7.00 horas en la calle Jaume II. Al parecer, en un momento del incidente, uno de los implicados dio un empujón al otro, que se habría golpeado con un anclaje para aparcar bicicletas y cayó al suelo.
El hombre se levantó y fue hasta su domicilio, donde explicó a sus familiares lo que había ocurrido y estos lo llevaron al hospital Arnau de Vilanova, lo que explica que no intervinieran ni los Mossos d’Esquadra, la Guardia Urbana o el Sistema d’Emergències Mèdiques. La víctima sufrió un traumatismo torácico con la fractura de cinco costillas y la perforación de un pulmón y quedó ingresado. Su estado empeoró con el paso de los días y acabó falleciendo el miércoles por la mañana en la UCI del hospital leridano.
La familia de la víctima formalizó el mismo miércoles la denuncia y los Mossos d’Esquadra abrieron las diligencias de investigación. Con el avance de las pesquisas, los agentes tienen cada vez más claro que hay una responsabilidad penal por lo que todo apunta a que el supuesto agresor será detenido, según informaron fuentes cercanas al caso.
Faltará por ver si lo imputan como presunto autor de un delito de homicidio por imprudencia (grave/leve) —habitual en personas que causan accidentes de tráfico mortal— o de homicidio doloso. No es un asunto baladí, ya que la gravedad de las penas es muy diferente ante el supuesto de llegar de llegar a juicio.