Al menos 270 muertos y 90 heridos en un ataque contra una mezquita en Egipto

Al menos a 270 personas murieron y 90 resultaron ayer heridas en un ataque terrorista contra la mezquita de Al Rauda, en Al Arish, al norte del Sinaí egipcio. Al parecer, un grupo de hombres armados colocó artefactos explosivos de fabricación casera alrededor del templo y los hicieron detonar a la salida de los fieles del rezo del viernes, día sagrado para los musulmanes. Tras la explosión los terroristas dispararon a las personas que intentaron escapar de la masacre, la más sangrienta de la historia reciente del país. Según los testigos, las primeras ambulancias que llegaron al lugar de los hechos para atender a los heridos también fueron atacadas por los radicales, que prendieron fuego a sus coches para bloquear el acceso a la mezquita. Aparentemente, la mayoría de víctimas eran sufíes, una corriente mística del islam a la que los yihadistas acusan de “apostasía”.

Según fuentes de las fuerzas de seguridad egipcias, el Ejército nacional respondió con el bombardeo de las zonas montañosas próximas, donde sospechaban que se escondían los atacantes. Según los militares, la operación “no se dará por concluida hasta que se erradique a todos los implicados en el ataque”. Al cierre de esta edición, el atentado no había sido reivindicado por ningún grupo terrorista y la presidencia egipcia declaró tres días de luto. Tras reunirse con el Consejo de Defensa Nacional para evaluar la situación, el presidente egipcio Abdelfatah al Sisi aseguró que responderán con “una fuerza brutal” a los ataques, pues “nos vamos a vengar por nuestros hijos para recuperar la estabilidad, y vamos a responder a este acto con una fuerza brutal”.

Las fuerzas de seguridad responden con bombas en las zonas donde se escondían los atacantes

Al Sisi también mostró sus condolencias a los familiares de las víctimas, a las que ordenó el pago de 200.000 libras egipcias (unos 9.500 euros) en el caso de allegados muertos y 50.000 libras (unos 2.350 euros) para los de los heridos. Entre los fallecidos hay numerosos policías y soldados, además de civiles, mientras que los supervivientes fueron trasladados a diferentes hospitales en Al Arish, capital del norte del Sinaí, y el Hospital Instituto Naser, en la capital egipcia de El Cairo. En este sentido, los centros médicos permanecieron colapsados durante todo el día de ayer.

La Fiscalía General de Egipcio informó a través de un comunicado que las fiscalías de Seguridad del Estado y de Ismailiya ya se han hecho cargo de la investigación para esclarecer lo ocurrido.

EEUU y Rusia tachan el atentado de “horrible y cobarde” El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, expresó ayer su más rotunda condena al atentado terrorista, el más sangriento de la historia reciente del país. “Horrible y cobarde ataque terrorista contra fieles inocentes e indefensos en Egipto”, publicó el mandatario a través de su cuenta de Twitter, a la vez que reiteraba su mensaje de lucha contra el yihadismo. También el presidente de Rusia, Vladimir Putin, extendió sus condolencias a las familias y allegados de las víctimas de un atentado “atroz y cínico”. “Es una muestra más de que a los terroristas les son ajenos los conceptos de la moral humana”, dijo en un comunicado. En la nota, el presidente ruso subrayó que su gobierno está preparado para intensificar la cooperación antiterrorista con El Cairo, antes de expresar nuevas palabras de compasión a las familias de los muertos y desear una pronta recuperación a las más de 100 personas que resultaron heridas.