La 'Manada' de Manresa intimidó a la víctima mostrando una pistola

La menor que fue víctima de una supuesta violación múltiple en una fábrica abandonada de Manresa en 2016 declaró ayer en la Audiencia de Barcelona que se sintió “intimidada” por los acusados ,ya que estos exhibieron una pistola que “se iban pasando” y parecía estar cargada.

En sus declaraciones, que hizo detrás de un biombo para no tener contacto con los agresores, la chica, que ahora tiene 17 años, confesó recordar poco de la noche de los hechos debido a la ingesta de alcohol y marihuana, además cree que le pusieron alguna droga en la bebida. También relató que fue una de sus amigas la que le explicó que los seis procesados la habían llevado a la caseta de la fábrica para violarla por turnos y que fue esta la que la encontró en el suelo llorando mientras la agredían. La víctima también indicó recordar fugazmente fragmentos de tres de los acusados agrediéndola mientras otras personas se masturbaban.

Además de la joven también declararon algunos testigos que se encontraban en la fiesta donde sucedieron los hechos. La principal testigo, amiga de la víctima, corroboró la violación por turnos y aseguró que tras la agresión tuvo que convencer a los acusados que las dejaran irse porque querían arrojar a la menor al río. “Les tuve que decir que me la llevaba, la duchaba y le daba una pastilla porque la querían tirar a un río”, aseguró entre llantos. También dijo que la chica se fue con uno de los acusados voluntariamente a una caseta y una hora después este regresó a la fiesta solo y mostrando un reloj dijo “mira, 15 minutos cada uno”. Cuando la testigo acudió a la caseta pudo ver como otro de los acusados penetraba a la menor y los demás estaban con los pantalones bajados y pidió ayuda para sacarla de allí, entonces otro de los procesados le puso una pistola en la boca y la amenazó si contaba lo que había pasado.

Un grupo de mujeres se concentró ante la puerta de la Audiencia para solidarizarse con la víctima mostrando pancartas que rezaban “no es abuso, es violación”. Por la tarde, más de 300 personas se concentraron en la plaza Sant Jaume de Barcelona para mostrar su apoyo a la menor. En la manifestación se escucharon cánticos contra la violencia a las mujeres.