Bronca en el Congreso por la ausencia del rey en el acto judicial en Barcelona

El Congreso de los Diputados vivió ayer una sesión bronca y con múltiples reproches cruzados entre el Gobierno central y la oposición a cuenta de la ausencia de Felipe VI en el acto de entrega de despachos judiciales, celebrado la semana pasada en Barcelona. El ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, reiteró que se pactó con La Zarzuela la ausencia del rey en la ciudad condal por la proximidad del aniversario del 1-O y de la sentencia a Quim Torra. Por su parte, el presidente del Ejecutivo central, Pedro Sánchez, criticó al PP por querer apropiarse de la figura del monarca mientras que el líder de los populares, Pablo Casado, le atacó por no condenar las críticas a Felipe VI del vicepresidente segundo, Pablo Iglesias, y del ministro de Consumo, Alberto Garzón, por la llamada al presidente del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes. Uno de los momentos de mayor tensión del día fue cuando el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, sacó una imagen del monarca durante su infancia con el dictador Francisco Franco. “A Felipe lo votó un español que se llama Francisco Franco”, sentenció el republicano dirigéndose a la bancada derechista. Además, aseguró que el jefe del Estado es el diputado número 53 de los ultraderechistas de Vox.