Siete días para el adiós de Merkel

Alemania entra en la fase final de la campaña para unos comicios federales que se perfilan de resultado incierto. Tras unos primeros compases de la contienda electoral favorables para Los Verdes, la situación viró después hacia un triunfo conservador y ahora apunta a que el socialdemócrata Olaf Scholz, salvo sorpresa de última hora, será el nuevo canciller.

Nada ha seguido el guión de lo que han sido las elecciones germanas en la llamada era de Angela Merkel, en que la líder conservadora guió hacia la victoria a su bloque, formado la CDU y los bávaros de la CSU. Con la designación en marzo de Annalena Baerbock como candidata de Los Verdes se vislumbró la opción de que a Merkel, tras 16 años en el poder, la sucediera otra mujer, ahora una ecologista. Los sondeos dispararon a la primera posición a la representante de un partido que en las anteriores generales, en 2017, quedó en última posición entre las fuerzas parlamentarias, con un 8,9%.

Habría sido un hito para un partido que hasta ahora a escala federal solo consiguió ser el socio minoritario en las dos legislaturas del socialdemócrata Gerhard Schröder al frente de la cancillería. Su auge, observado en sucesivos comicios regionales, se atribuía a que la emergencia climática es una de las grandes preocupaciones del ciudadano común. .

Merkel abandonará el poder después de 16 años ejerciendo como canciller federal de Alemania

Todo esto ocurría mientras el bloque conservador de Merkel se enredaba en un pulso interno entre el centrista Armin Lachet y el ala más derechista. Laschet logró su elección como líder de la CDU en enero, a lo que siguió su designación como candidato, tras imponerse al bávaro Markus Söder. La pugna interna debilitó a la coalición de la democracia cristiana. Pero el “efecto Baerboc” se disipó en medio de una serie de deslices de la candidata, de la que además se destacaba su nula experiencia de gestión. El bloque de Merkel empezó a recuperar terreno. Hasta que las devastadoras inundaciones del oeste del país se cebaron en regiones de Renania del Norte-Westfalia, el Estado federado del que Laschet es primer ministro. Resurgieron las dudas acerca de su capacidad para afrontar crisis, ya cuestionada en los momentos más álgidos de la pandemia. Más demoledor aún fue un vídeo que se viralizó, en el que aparecía riendo a carcajadas en una visita a las zonas afectadas por el temporal.El tercer vuelco en los sondeos vino de Scholz. El ministro de Finanzas, en la tercera posición en los sondeos durante meses y candidato de un Partido Socialdemócrata (SPD) que parecía condenado a hundirse a mínimos, tomó ímpetu como vía continuista de Merkel, pese a representar a la formación rival. El ministro despegó semana a semana en las encuestas.

Laschet pasó al contraataque advirtiendo de que una victoria de Scholz implica el peligro de que el siguiente Gobierno sea un tripartito con ecologistas y neocomunistas. Las advertencias sobre un frente izquierdista no parecen haber hecho mella en el elector. Más delicada para Scholz será la comparecencia mañana ante la comisión parlamentaria de Finanzas, tras el registro de hace una semana en su departamento en relación a una investigación sobre blanqueo de capitales.

La canciller entra en campaña para salvar a los suyosA pesar de haberse mantenido al margen de la contienda electoral hasta el último momento, la todavía canciller alemana, Angela Merkel, ha entrado de lleno en la campaña para intentar salvar los muebles de la CDU, que podría irse a la oposición por primera vez en más de quince años.