JUSTICIA
El CGPJ investiga a Peinado tras dos quejas de Bolaños
En relación con el interrogatorio en abril por el caso Begoña. El Tribunal Supremo rechazó en julio investigar al ministro

El ministro de Justicia, Félix Bolaños, en un acto en Catalunya. - DAVID ZORRAKINO / EUROPA PRESS
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) abrió ayer diligencias informativas sobre el juez Juan Carlos Peinado por dos quejas presentadas por el ministro de Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes, Félix Bolaños, tras su declaración como testigo en el caso Begoña Gómez. Bolaños fue interrogado el pasado 16 de abril por Peinado en relación a la contratación de Cristina Álvarez como asesora de la mujer del presidente del Gobierno.
El juez instructor del caso pidió al Tribunal Supremo (TS) investigar al ministro por malversación –en la contratación– y por falso testimonio –en el procedimiento–, después de que Bolaños contestara “con evasivas” y “sonriese en algunas respuestas”, además de calificar como “soprendente” el interrogatorio al que fue sometido. El ministro, que en 2018 era secretario general de Presidencia, se desligó del nombramiento de Álvarez como asesora, pero aseguró que su designación se llevó a cabo conforme a la ley de contratación de personal eventual.
En julio, el TS archivó la exposición de Peinado, al considerar que no había ni “un mínimo respaldo indiciario” que permitiera encausar a Bolaños, quien elevó dos quejas –el 4 de junio y el 29 de julio–, por presuntas irregularidades cometidas por el juez durante el interrogatorio. Según fuentes del ministerio, la voluntad de Bolaños era no hacer públicas las denuncias y fue Peinado quien informó de las mismas –sin nombrar a quien las presentó– en el auto del lunes en el que imputó un delito de malversación de caudales públicos a Begoña Gómez y la llamó a declarar en septiembre. Por su parte, el Gobierno se mostró “indignado” el martes por la investigación de Peinado “prospectiva” a “usted por ser usted”.
Fuentes judiciales recalcaron que la diligencia informativa es un procedimiento “habitual” que se realiza cada vez que se recibe una queja para determinar si hay material disciplinaria y si procede o no abrir expediente, por lo que no implica sanción.