Una muerte anunciada

Cuatro, que sigue con su particular maldición con los programas de tarde (no le funciona absolutamente ninguno), ha decidido cortar por lo sano y ha cancelado definitivamente el concurso El Bribón, o al menos lo hará cuando acaben de emitir los que ya tienen grabados. De hecho, lo suyo ha sido la crónica de una muerte anunciada en el sentido más literal de la palabra. Desde su estreno el 25 de noviembre de 2019, jamás pudo sobrepasar el dos por ciento de audiencia. Una cifra ciertamente irrisoria. Lo de lo que se veía venir era público y notorio. Pablo Chiapella (Alicante 1976) no fue la mejor elección, sin duda, para ponerlo al frente de un concurso ya de por si sin chispa alguna. Discreto monologuista, venía ya de fracasar al frente de El paisano en TVE. De hecho, Chiapella debe toda su popularidad a su garrulo personaje de Amador Rivas en La que se avecina, pero fuera de la urbanización de Montepinar su recorrido es muy limitado. Pablo Chiapella tiene contrato en vigor con Mediaset, por lo que seguirá en la casa a la espera de un nuevo proyecto. Veremos.