El equipo filial

A pesar de que ayer llegó la primera derrota de la temporada con una mala imagen en la pista del potente Valladolid, en ningún momento tenemos que obviar el gran inicio de temporada del Força Lleida y ante equipos que estarán en la parte alta de la clasificación al final de la fase regular. Hay que felicitar, una vez más, el trabajo hecho durante estos primeros partidos, con un equipo renovado, en el que se intercalan caras conocidas con nuevas incorporaciones durante el mercado de verano. Pero en estos primeros momentos de la temporada, querría resaltar un paso adelante y muy necesario que ha dado el club en este curso 2022-2023.

Estoy hablando de la creación de un equipo B. La finalidad de estos conjuntos filiales es la de dar la oportunidad a los jugadores de la base para seguir compitiendo y creciendo, y de poder ser a la larga el equipo trampolín para poder llegar a la primera plantilla, sin tener que marcharse cedidos o irse a otros clubes del territorio.Está muy bien firmar convenios con el FC Barcelona o tener equipos vinculados como el CB Alpicat; siempre y cuando lleguen jugadores jóvenes y con futuro. Pero muchas veces su vinculación en el equipo es por muy poco tiempo.

Un filial fuerte permitirá dar una continuidad a los jugadores de la base, que sienten los colores del club, que han pasado por las diferentes categorías de la cantera y que tienen el ADN del Força Lleida. Con los jugadores formados en casa, en el Barris Nord, es más fácil que puedan tener una vinculación más estrecha y por más tiempo durante los próximos años. Será importante cuidar a este filial para poder ver, en un futuro no muy lejano, jugadores formados en la base en el primer equipo del ICG Força Lleida.