Cataluña restringe la movilidad a la comarca y establece franjas horarias en la restauración
Las burbujas de convivencia podrán ir a segundas residencias o a establecimientos hoteleros en todo el territorio catalán
Imagen de archivo de clientes en la terraza de un bar.
Cataluña restringirá la movilidad diaria al ámbito comarcal excepto visitas a familiares durante las fiestas de Navidad, sin modificar el máximo de 10 comensales en casa durante los días festivos. La ampliación de las reuniones sociales a un máximo de 10 personas y hasta dos burbujas de convivencia será los días 24, 25, 26 y 31 de diciembre y también el 6 de enero –el resto de días se mantiene el límite actual de 6 personas–.
Con respecto al retraso del toque de queda, se mantiene el confinamiento nocturno a partir de las 22 horas –previsto en todos las fases de plan de apertura– a excepción del 24 y el 31 de diciembre, que se alarga hasta la 1 de la madrugada, y el 6 de enero, que será hasta las 23 horas
El límite comarcal tendrá excepciones como viajes a segundas residencias o establecimientos hoteleros, siempre en una única burbuja de convivencia. Se podrá salir del perímetro de Cataluña para encuentros familiares y Andorra se integra en el Alt Urgell y la movilidad se regirá por las mismas medidas.
En cuanto a la restauración, establecerá franjas horarias en bares y restaurantes para que estén abiertos sólo en las horas de las comidas. Así, el Govern limita la apertura de la restauración al público a los desayunos y comidas, con un horario restringido de 7.30h a 9.30h y de 13h a 15.30h. Además, para las cenas sólo se podrá ofrecer servicio de recogida en el local, entre las 19h y las 22h, y a domicilio, hasta las 23h. Además, se prohíbe la apertura de los bares y restaurantes de los centros comerciales.
Tampoco podrán abrir los gimnasios dentro de los centros comerciales, y el resto tendrán que mantener un aforo del 30% y hacer todas las actividades con mascarilla. Por lo tanto, las actividades de alta intensidad se tendrán que hacer en espacios exteriores o suspenderse.
Las nuevas medidas entrarán en vigor el lunes 21 de diciembre, con vigencia hasta el 11 de enero y serán revisadas el 28 de diciembre.
El vicepresidente del Govern, Pere Aragonès, y la consellera de Presidencia, Meritxell Budó, han explicado en una rueda de prensa telemática estas medidas "quirúrgicas", que suponen un "paso atrás" en el plan de desescalada. "No podrá ser la Navidad que querríamos, sabemos que no vamos bien y ante la constatación de que el aumento de contagios no se ha estabilizado y sigue creciendo, el Govern ha decidido actuar porque hay que frenar la covid como sea, cueste lo que cueste", ha afirmado Aragonès.
Las actividades culturales y las ceremonias de culto no se verán afectadas por este retroceso en la desescalada. Así, la cultura seguirá abierta al 50% de aforo o a las 1.000 personas como máximo –siempre con buena ventilación–, mientras que en las ceremonias religiosas el aforo será al 30% o hasta un límite de 1.000 personas.
Retorno a la escuela el 11 de enero
Por otra parte, Budó ha recordado que el retorno a la escuela se ha retrasado hasta el 11 de enero. La portavoz del Govern ha dicho que esta decisión los da "unos días de margen" para detectar contagios que se hayan podido producir durante las fiestas y evitar que se trasladen al grupo burbuja de la clase. "Miraremos si se puede empezar el curso con todas las garantías", ha asegurado Budó, que ha añadido que con estos días gana "el tiempo es oro".
Teletrabajo
La portavoz también ha insistido en que se tiene que hacer teletrabajo siempre que sea posible y ha recordado que eso ayudaría "muchísimo" a reducir la movilidad. "Es un compromiso de país y de todos, empresas, sindicatos y trabajadores", ha dicho.
Budó niega discrepancias por|para los restricciones
En relación a la rueda de prensa para anunciar las nuevas restricciones, que en un inicio estaba prevista para el jueves por la noche, Budó ha negado que se haya retrasado por discrepancias entre los partidos en Govern. "No se puede tomar una decisión deprisa y corriendo, queríamos evaluar y valorar qué comporta cada medida", ha explicado, y ha añadido que prefirieron "esperar unas horas" para "trabajar todos juntos" las diferentes opciones.
