Los antidepresivos lideran este verano el desabastecimiento en las farmacias españolas
La falta de suministro de estos medicamentos cuadruplica las cifras de 2024 y afecta gravemente pacientes con trastornos mentales, con Anafranil como el más escaso
Imagen de archivo de una famracia.
Los medicamentos antidepresivos encabezan actualmente la lista de fármacos con más problemas de disponibilidad a las farmacias españolas, superando a otros tratamientos que tradicionalmente habían liderado el desabastecimiento como el Ozempic, utilizado para la diabetes, o el Concerta, prescrito para el trastorno por déficit de atención e hiperactividad (TDAH). Así lo confirma el último informe elaborado por la red digital de farmacias LUDA Partners, publicado este 22 de julio de 2025.
Este cambio en el patrón de desabastecimiento marca un giro significativo con respecto a la tendencia observada durante el último año, cuando medicamentos como Ozempic -que ganó popularidad por sus efectos en la pérdida de peso- y Concerta dominaban las notificaciones de problemas de suministro. "Ahora, los antidepresivos han pasado en el primer lugar, mostrando un incremento notable en las notificaciones de faltas por parte de los farmacéuticos," señala el informe de LUDA Partners, evidenciando una situación que preocupa tanto a profesionales sanitarios como a pacientes.
Según los datos recogidos, la escasez de estos fármacos afecta numerosas provincias del territorio nacional, generando especial inquietud en un contexto donde los problemas de salud mental han experimentado un aumento considerable en los últimos años. "Esta situación es especialmente delicada en un país donde los problemas de salud mental se han incrementado en los últimos años, y donde la adherencia al tratamiento es clave para evitar un agravamiento de los síntomas", explica la red de farmacias en su análisis.
Anafranil lidera la escasez de antidepresivos
El estudio de LUDA Partners destaca que Anafranil se ha convertido en el medicamento más afectado por los problemas de suministro, representando el 73% de las localizaciones relacionadas con tratamientos antidepresivos. Lo sigue Ludiomil, con un 7% de las notificaciones de desabastecimiento, y Norebox, que acumula un 5% de los casos reportados. El 15% restante corresponde a otras marcas destinadas al tratamiento de patologías relacionadas con la salud mental.
Les datos resultan todavía más alarmantes cuando se comparan con periodos anteriores, ya que el número de reportes de faltas de antidepresivos se ha cuadruplicado tanto respecto al inicio de 2025 como en comparación con el mismo periodo de 2024. Esta tendencia refleja un problema creciente en la cadena de suministro farmacéutico nacional que podría tener importantes repercusiones en la salud pública.
Impacto en el tratamiento de la salud mental
El desabastecimiento de antidepresivos plantea serias complicaciones para los pacientes que dependen de estos medicamentos para mantener su estabilidad emocional y psicológica. Los especialistas en psiquiatría advierten que la interrupción de estos tratamientos puede provocar síndrome de discontinuación, recaídas y empeoramientos significativos de la condición de los pacientes, especialmente en aquellos con trastornos depresivos graves o crónicos.
La continuidad en el tratamiento con antidepresivos es fundamental para garantizar la eficacia terapéutica y prevenir recaídas en los pacientes. Cualquier interrupción no planificada puede tener consecuencias negativas importantes", explican fuentes de la Sociedad Española de Psiquiatría consultadas después de conocerse los resultados del estudio.
Los expertos recomiendan a los pacientes que se anticipen y consulten con sus médicos ante posibles problemas de disponibilidad, para valorar alternativas terapéuticas en caso necesario. Asimismo, sugieren a los profesionales sanitarios considerar opciones de prescripción que tengan menos problemas de suministro cuando inicien nuevos tratamientos.
Causas del desabastecimiento farmacéutico
Aunque el informe de LUDA Partners no profundiza en las causas específicas de este desabastecimiento, los expertos del sector farmacéutico apuntan a varios factores que podrían estar contribuyendo a esta situación. Entre ellos destacan los problemas en la cadena de suministro global que viene arrastrándose desde la pandemia, el aumento de la demanda de medicamentos para trastornos mentales después del incremento de casos diagnosticados en los últimos años, y posibles dificultades en la producción de principios activos específicos.
La Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) mantiene un registro actualizado de los fármacos con problemas de suministro y trabaja en coordinación con laboratorios y distribuidores para minimizar el impacto en los pacientes. Sin embargo, el creciente número de medicamentos afectados supone un desafío cada vez mayor para el sistema sanitario.
