¿Cómo se puede comprobar si las balizas V16 funcionan correctamente sin alertar a la DGT?
Conoce el margen de tiempo que permite verificar su funcionamiento sin enviar señales a la red móvil ni activar avisos oficiales en la carretera

Una baliza V16 en funcionamiento.
La incorporación de las balizas V16 en el equipamiento obligatorio de vehículos en España ya es inminente. Desde que se anunció que a partir del 1 de enero de 2026 todos los conductores tendrán que llevar una de estas señales luminosas conectadas, las dudas sobre su uso, funcionamiento y manera de comprobarlas han ido creciendo. Una de las preguntas más frecuentes es si al probar la baliza después de la compra esta genera un aviso a la Dirección General de Tráfico (DGT) o activa señalizaciones en los paneles de carretera o aplicaciones.
La baliza V16 no sólo es un dispositivo manual que emite luz intermitente amarilla para alertar de incidencias, sino que también se conecta a la plataforma DGT 3.0 mediante una tarjeta SIM integrada. Eso significa que, en funcionamiento real, transmite la ubicación GPS en tiempo real para avisar otros conductores y las autoridades sobre accidentes o averías.
No obstante, la DGT ha aclarado que existe un intervalo de 100 segundos desde su activación durante el cual la baliza "inicializa" sus sistemas sin enviar datos de localización ni generar alertas. Este tiempo permite a los usuarios comprobar la luz intermitente sin activar la red de emergencias ni que su posición aparezca en paneles informativos.
Funcionamiento básico y periodo seguro para pruebas
Les balizas V16 están diseñadas para colocarse sobre el vehículo en un lugar visible, activándose manualmente. Una vez encendidas, emiten una señal luminosa amarilla intermitente que sirve para alertar otros conductores en situaciones de peligro, como averías o accidentes.
La conectividad con la red DGT 3.0, mediante su tarjeta SIM integrada, es lo que diferencia estos dispositivos de otras señales luminosas tradicionales. Gracias a esta conexión, en tiempo real se transmite la posición GPS para que los sistemas de tráfico puedan mostrar avisos en paneles de carretera o enviar notificaciones a aplicaciones de navegación compatibles.
No obstante, cuando se trata de verificar si la baliza funciona correctamente después de la compra, surge la preocupación entre los propietarios sobre si podría activarse una alarma falsa o enviar erróneamente su ubicación a la DGT.
Para evitar estos falsos positivos y garantizar un uso responsable, la agencia de tráfico establece un margen de 100 segundos en que la baliza se enciende y realiza las comprobaciones técnicas sin establecer conexión ni transmitir información.
¿Cómo de importante es este margen de 100 segundos?
Este periodo de 100 segundos actúa como una ventana segura para realizar pruebas. Durante este intervalo, los usuarios pueden comprobar que la luz amarilla funcione correctamente sin que se genere una alerta oficial ni se comparta la localización del vehículo.
Este mecanismo es fundamental para evitar situaciones poco deseadas, como que un menor encienda y apague el dispositivo de forma accidental, o conductores que simplemente quieran verificar su baliza sin provocar la activación de sistemas de emergencia.
La baliza aprovecha estos 100 segundos para establecer conexión en la red móvil, revisar la calidad de la señal GPS y preparar la transmisión de datos, sin enviar información hasta que este tiempo se haya superado.
Así, se garantiza que ninguna posición errónea o señales falsas lleguen a la plataforma DGT 3.0 ni que la ubicación del vehículo aparezca en las pantallas informativas o aplicaciones conectadas.