SUCESOS
Prisión para 2 de los 4 arrestados por el tiroteo por drogas de Tàrrega
Son de una misma familia y, según los investigadores, se dedicaban al tráfico de estupefacientes. En el operativo participó el GEI, la unidad de élite de los Mossos

Imagen de dos de las pistolas decomisadas y del impacto de bala en un coche. - MOSSOS D’ESQUADRA
El juzgado de guardia de Cervera decretó ayer prisión provisional para dos de los cuatro detenidos el miércoles en Tàrrega por su presunta relación con el tiroteo que hubo el pasado 23 de febrero en la capital del Urgell, como avanzó SEGRE. Hay dos causas abiertas, una de ellas por el tiroteo (intento de homicidio, lesiones y desórdenes, entre otros delitos) y la otra, por tráfico drogas y tenencia ilícita de armas. Por la primera, los cuatro investigados quedaron libres con cargos con personaciones periódicas. Por la segunda, para dos de los investigados –un hombre de 42 años y su hijo de 19– se decretó su ingreso en prisión.
Los Mossos, que ayer hicieron público el operativo, informaron que los detenidos tienen entre 19 y 43 años y pertenecen a una misma familia que supuestamente se dedicaría a la venta de droga al detalle. Las vigilancias y seguimientos que les hicieron permitieron confirmar la actividad ilícita y determinar que el tiroteo se produjo entre ellos por desavenencias. En un domicilio de la calle Enric de Càrcer detuvieron a un joven de 19 años y a su padre de 42. Allí hallaron 13 armas de fuego (un revólver de 9 mm y uno de 22 mm, así como munición, pistolas, revólveres, escopetas y subfusiles de aire comprimido, simuladas o históricas) y 11 armas blancas, como avanzó este periódico ayer. También localizaron 40 gramos de cocaína, 20 de heroína, 28 de anfetamina, 57 de éxtasis, 370 de marihuana y 120 de hachís.
En la calle Indústria arrestaron a un hombre de 31 años y localizaron cinco móviles y una báscula de precisión. También intervieron un coche que presentaba un agujero de bala, de donde la Policía Científica recupó un proyectil. Los testigos del incidente situarían el coche en el lugar del tiroteo. Por último, en un domicilio de la calle del Ferrocarril –donde ocurrieron los hechos– detuvieron a un hombre de 43 años y recuperaron ocho móviles y 1.450 euros. Este individuo sería el presunto autor de los disparos y fue detenido por tentativa de homicidio.
La investigación sigue abierta para determinar el origen de los teléfonos y los resultados de balística. En el operativo participó el GEI (Grup Especial d’Intervenció), el grupo de élite de los Mossos.