HOMENAJES
Les Borges recuerda a vecinos deportados a los campos nazis instalando 7 ‘Stolpersteine’
Acto de homenaje ante las residencias en las que vivieron en libertad, presidido por el conseller Ramon Espadaler. Con la participación de familiares y alumnos de la localidad, y ofrenda floral

Familiares de la víctimas con alumnos de Les Borges. - E. FARNELL
El consell de Justicia y Calidad Democrática, Ramon Espadaler, presidió ayer el acto de instalación de siete adoquines Stolpersteine en Les Borges Blanques en homenaje a siete vecinos del municipio que fueron víctimas de la deportación a campos de concentración nazis. “La memoria democrática tiene un sentido, que es el de nunca más”, destacó Espadaler. Afirmó que el acto de ayer “es de justicia porque durante mucho tiempo las víctimas han sido anónimas y el dolor por ellas se ha vivido en el seno de sus familias. Ahora, con este reconocimiento público, su legado pasa a ser de todo el pueblo”, dijo. Durante el acto puso en valor la dignificación de las víctimas a través de la iniciativa “necesaria y de justicia”. Añadió que es fundamental hacer actos como éste por la memoria, pero también para invitar a la reflexión colectiva, “ya que estamos en un presente en el que la democracia todavía está amenazada”. En este sentido, remarcó que la memoria democrática se fundamenta en los derechos a la verdad, la justicia, la reparación y las garantías de no repetición, indispensables para garantizar el Mai Més.
El acto, organizado por el consistorio de Les Borges Blanques y el Centre d’Estudis de Les Garrigues, contó con la presencia de familiares de las víctimas. Los adoquines se instalaron delante de la última residencia donde la persona vivió en libertad. Los homenajeados fueron Benvingut Andreu Solans, Miquel Aguilar Bru, Josep Boldú Segarra, Amadeu Pons Companys, Joan Esteve Llussà, Agustí Prunera Mur y Marcel·lí Boldú Corbella. Durante el recorrido, los alumnos del instituto Josep Vallverdú y del colegio Mare de Déu de Montserrat leyeron la historia de las víctimas y se hizo una ofrenda floral como símbolo de reconocimiento colectivo. El director del Memorial Democràtic, Jordi Agulló, apuntó que la “memoria es una responsabilidad colectiva que obliga a mantener vivo el legado de las víctimas”. Actualmente en Catalunya hay 646 Stolpersteine y se consolida como uno de los territorios del Estado con más presencia de estas “piedras de la memoria”. En Lleida este año se instalarán 34 en distintos municipios. Tàrrega también conmemoró ayer el día de la Memoria histórica y democrática, fecha que quedó fijada desde 2021, cuando la capital del Urgell inauguró los adoquines Stolpersteine.