Reglamento de control de gatos callejeros en Tàrrega

El ayuntamiento de Tàrrega impulsa la creación del primer plan de control y gestión etica de colonias felinas urbanas para estabilizar la población de gatos ferales. Entre otras acciones, se elaborará un censo felino donde entidades y ciudadanía podrán informar de la existencia de una colonia y se fomentará la esterilización de gatos ferales para evitar un crecimiento descontrolado. El texto marca como retos mejorar la calidad de vida y la esperanza de vida de los animales; reducir los abandonos y aumentar las adopciones; minimizar la dimensión poblacional; y reducir o eliminar los posibles problemas derivados de su presencia, como la vocalización característica de las hembras en celo, las conductas de marcaje y comportamiento agresivo de los machos o la suciedad en el entorno.Para ello, el ayuntamiento considera imprescindible la colaboración y la complicidad de las asociaciones locales para la defensa de los animales, protectoras de animales, clínicas veterinarias, Policia Local y ciudadanía en general. El proyecto también contempla la creación de las figuras encargadas de cuidar a los gatos o capturarlos para la esterilización, así como la descripción de las condiciones de higiene, mantenimiento y alimentación que tendrán que tener las colonias felinas urbanas registradas. La concejala de Servicios Municipales y Medio Ambiente, Laia Recasens, explicó que “en 5 años tenemos la voluntad de poder tener controladas todas las colonias de gatos ferales del municipio con el máximo número de animales esterilizados con el método CER (Captura-Esterilización-Retorno)”. Además, recordó “la obligatoriedad de censar a los gatos domésticos con chips”.En 2021 Tàrrega puso en marcha la gatera municipal en el antiguo matadero para albergar de forma temporal a los felinos perdidos, abandonados o malheridos que se recogen en la calle mientras requieren atención veterinaria y esperan ser dados en adopción. A finales del 2024, se llevó a cabo una campaña de esterilización de gatos ferales junto al río Ondara (11), en el polígono de Llevant (40) y en los pueblos de Altet, Claravalls y Santa Maria de Montmagastrell (40). El consistorio centró esta actuación en las colonias donde se detectaron ejemplares con un estado de salud más precario y, a partir de ahora, se quiere ampliar las zonas de influencia con el nuevo protocolo.