FRONTERAS
Cazado en la N-230 en Areny con 430.500 € en tabaco de contrabando
Detenido el conductor de una furgoneta que llevaba 70.000 cajetillas

Imagen de las cajas que escondían las cajetillas de tabaco. - GUARDIA CIVIL
La Guardia Civil de Huesca detuvo el lunes en la carretera N-230 en Areny, en la Franja, al conductor de una furgoneta que transportaba un cargamento de 70.000 cajetillas de tabaco de contrabando valoradas en más de 430.000 euros. El chófer, un vecino de la provincia de Castelló, fue arrestado como presunto autor de un de un delito contra la ley de contrabando de tabaco.
El hallazgo del alijo tuvo lugar durante un control de efectivos del destacamento de Fiscal y Fronteras de la comandancia de la Guardia Civil de Huesca. Dieron el alto a una furgoneta para la comprobación de la carga. Los agentes hallaron 140 cajas de color blanco sin ningún tipo de inscripción que ocultaban 70.000 cajetillas de tabaco de una marca conocida sin timbrar y serigrafiadas en un idioma extranjero. El conductor no pudo justificar documentalmente la procedencia de la mercancía, valorada en el mercado estatal en unos 430.500 euros, por lo que procedieron a su detención.
Las diligencias fueron entregadas junto con el detenido al juzgado de Instrucción número 1 de Barbastro, que decretó la libertad con cargos para el investigado.
En la última década han caído en picado los detenidos en Lleida por entrar ilegalmente tabaco desde Andorra y se han reducido enormemente el número de cajetillas incautadas. Una de las causas que es el explican es el aumento del precio del tabaco en el Principat, que se ha traducido en un beneficio menor para los infractores. En cambio, hacia Francia se siguen registrando alijos a diario.
De esta forma, por ejemplo, en las comarcas de Lleida se pasó de los 55 detenidos y 13 operaciones policiales que hubo en 2015 a los solo dos arrestos y una operación en 2019. Cabe recordar que se considera delito si la cantidad incautada supera los 15.000 euros de valor. Si es menor a los 15.000 euros, es una infracción administrativa. Esto se ha traducido en un descenso de las cajetillas decomisadas en los últimos años. En 2015 fueron 236.610 por las 55.401 de 2019.