SEGRE
Victòria Porta intenta superar a una rival durante el partido de ayer.

Victòria Porta intenta superar a una rival durante el partido de ayer.PAU CARAZÓ

Publicado por

Creado:

Actualizado:

El Vila-Sana cayó ayer 7-4 en la pista del Terrassa, el colista, en un partido en el que la falta de acierto de las del Pla d’Urgell fue determinante. Las locales se pusieron 7-0, mientras que el Vila-Sana no fue capaz de inaugurar su casillero hasta los últimos quince minutos de partido.

Hasta el minuto once, no subió al marcador el primer tanto, obra de Anton. Viéndose arriba, el Terrassa se cerró en su campo y se dedicó a proteger su portería e intentar sorprender a las leridanas al contraataque. De esta forma, las del Vallès aún consiguieron dos goles más antes del descanso (3-0).

Tras la pausa, el panorama siguió igual y el Vila-Sana encajó tres goles más, dos de ellos de penalti. Y, a pesar de que en los últimos minutos lo intentó, los cuatro goles consecutivos de las de amarillo, obra de Cadrecha, por partida doble, Cid y Victòria Porta no fueron suficiente.

Por otra parte, el presidente del Vila-Sana, Ramón Porta, se mostró indignado tras el partido por el arbitraje recibido y la actitud del entrenador del Terrassa, Juan Solé. “No perdimos por culpa del árbitro, pero desde que nos quejamos a la federación por la falta de igualdad entre hombres y mujeres recibimos arbitrajes muy malos”, explicó. “No puede ser que el entrenador rival escupa en la pista e insulte a nuestras jugadoras sin que pase nada”, añadió. “Por todo esto, vamos a enviar una queja a la Federación”.

tracking