Triunfo de oro

El Cadí La Seu se dio ayer una enorme dosis de optimismo al conseguir una victoria de auténtico oro ante el Baxi Ferrol (73-49), en el partido en el que debutaron sus recientes incorporaciones, Coulibaly y Yurena Díaz, recibidas ambas con una gran ovación por parte de la afición urgelense. El equipo de Isaac Fernández sigue en zona de descenso, pero con seis victorias, empatado con los cuatro equipos que tiene por delante –Euskotren, Ensino, Araski y Celta– y con un partido menos, el que tiene pendiente ante el Joventut el próximo día 19.

La salida a pista del Cadí fue demoledora. Los dos primeros tiros a canasta los convirtieron Murekatete y Soler y el parcial de 4-0 no cesó de crecer. Con 11-0 pasados los cinco minutos de partido, el técnico del equipo gallego, Lino López, pidió tiempo muerto. Pero la herida por la que se desangraba el Ferrol siguió sin cerrarse. El Cadí, con un juego rápido, perfecto en defensa y gran acierto en ataque, dominando los rebotes, aumentó la diferencia con canastas de Gervasini y Murekatete y, tras dos triples de Ridard y Raventós, el parcial era de un escandaloso 21-0 a 3.29 para el final del cuarto. Isaac Fernández hizo salir entonces a Coulibaly –Yurena Díaz lo hizo a poco más de dos minutos para el final del partido–. El Ferrol anotó su primera canasta a tres minutos para el final del periodo, que se cerró con un contundente 25-6.

El Cadí comenzó igual de enchufado en el segundo cuarto, con dos canastas de Mandic y de Aguilar, que ampliaban la renta a veinte puntos, 29-9. Empezó a ganar en acierto el equipo rival con triple de Sánchez, pero el parcial volvió a ser local y el partido llegó al descanso con 43-19.

En el tercer cuarto el Baxi Ferrol intentó cerrar la defensa, apretó más a las leridanas, que seguían manteniendo una renta cómoda, con Ridard, Murekatete y Raventós muy acertadas –hasta cinco jugadoras del Cadí alcanzaron los dobles dígitos en anotación–. Aunque el cuarto lo ganó el Ferrol (10-17), se llegó al periodo definitivo con un cómodo 53-36.

En el último cuarto, una canasta inicial de Coulibaly y un triple de Ridard acabaron con las esperanzas del rival (58-36, a 6.50). El Cadí no sufrió en ningún momento y se llevó un gran triunfo. Y muy cómodo (73-49).