Josep Ramon Ibarz: «El primer día no podía subir al despacho por la escalera»

n Josep Ramon Ibarz, jefe de la Guardia Urbana de Lleida, ha padecido el coronavirus durante 55 días, cinco de ellos hospitalizado en la clínica Montserrat. Le dieron el alta el pasado 21 de mayo. “Los primeros días de trabajo me sentía muy cansado. Ni siquiera podía subir por las escaleras desde el parking del cuartel hasta mi despacho. Tenía que pararme en la primera planta y coger el ascensor”.

Ibarz calcula que volvió al trabajo con un 60 por ciento de la capacidad física que tenía antes de contagiarse. Ahora dice encontrarse a un 90 por ciento. El coronavirus ha tenido para él otra consecuencia que espera que desaparezca rápidamente: “una pérdida de capacidad de concentración. Estoy viendo una película, por ejemplo, y a la mitad del rodaje tengo que consultar cómo se titula porque no me acuerdo. No me había pasado nunca. También me pasa que leo un texto que no tiene ninguna dificultad y tengo que volver a leerlo. Me cuesta concentrarme”.

Finalmente, una tercera consecuencia es que el coronavirus le provocó una infección en un quiste y deberá someterse a una pequeña intervención quirúrgica. “Sé de al menos otras 4 personas que también les ha pasado”. Ibarz agradece el trato exquisito que le han dispensado durante estos 55 días tanto la clínica Montserrat como el CAP y el servicio de Epidemiología de Salud.