El Parlament exige a Torra someterse a una cuestión de confianza o convocar elecciones

El Parlament aprobó ayer una moción propuesta por el PSC-Units que emplaza al president de la Generalitat, Quim Torra, a someterse a una cuestión de confianza o en su defecto a convocar elecciones. Con 62 votos a favor y 61 en contra la oposición ganó el pulso contra JxCat y ERC por un voto de diferencia y la moción prosperó gracias a que la CUP no participó en la votación. El texto presentado por los socialistas constata “la inoperancia del Govern de la Generalitat, la falta de presupuestos para el año 2019 y la pérdida de la mayoría parlamentaria” y, por estos motivos, reclama al presidente de la Generalitat que de forma inmediata se someta a una cuestión de confianza o convoque elecciones.

Aunque la moción no tiene ningún efecto vinculante, el president dejó claro que no piensa someterse a una cuestión de confianza ni adelantar las elecciones. A través de su cuenta de Twitter, Torra aseguró que desoirá las exigencias del Parlament ya que considera que el juez Pablo Llanera ha contribuido a la aprobación con un “voto de calidad”, ya que no se pudo contar con los votos de los cuatro diputados de JxCat suspendidos por el Supremo, parlamentarios que hubieran invertido el resultado de la votación.

La número dos de JxCat, Laura Borràs, aseguró que la ley buscaba modernizar el Parlament

El presidente retó el pasado miércoles a la oposición a presentar una moción de censura en su contra si son capaces de encontrar a un candidato con posibilidades de ser investido, algo con probabilidad de fracaso debido a la alta división política.

Por su parte, los socialistas consideraron tildaron de una actitud de “vergonzosa” que Torra responda retándoles a plantear una moción de censura en lugar de actuar y recalcó que “estamos hartos de gestos y símbolos”. Ciudadanos culpó a los socialistas de haber “dado alas” al independentismo desde el Gobierno central y los tildó de “cómplices de abandono”. Por su parte, el líder del PPC, Alejandro Fernández, criticó que Torra sea “incapaz de reconocer” que planteó un programa de gobierno “imposible”. En Comú Podem instó a salir del “desgobierno” y de la “situación de parálisis” a través de una cuestión de confianza. Por otro lado, la CUP, que en otro tiempo era una aliada del Govern, justificó su no participación en la votación afirmando que la moción les parecía “una tomadura de pelo” al venir de PSC-Units, a quien acusó de tener el proyecto de “la prohibición, la prisión, el exilio y el chantaje permanente”, pero también instó al Govern a ser “responsable” y marcar una fecha de elecciones en Catalunya. JxCat y ERC defendieron al Govern y rechazaron las acusaciones de inoperancia y falta de objetivos y denunció que la oposición solo tiene “la mayoría para criticar”.