Elecciones vascas y gallegas

Torra anunció que convocaría elecciones después de la aprobación de los presupuestos, pero como no concretó fechas, el calendario sigue abierto y quienes sí lo han definido ya son los presidentes de Euskadi y de Galicia, que ayer convocaron formalmente los comicios para el domingo 5 de abril. Volverán a coincidir, como en las tres anteriores convocatorias, y apenas se adelantan unos meses porque la legislatura acababa a finales de septiembre y en los dos casos han querido evitar una posible coincidencia con las elecciones catalanas. El lehendakari Urkullu explicó que adelanta los comicios porque ya se está viviendo un clima pre-electoral y no quiere que unas elecciones en otoño marquen la política de todo el ejercicio, y aunque asegura que la cuestión catalana no ha influido, sí que es evidente que el PNV ha marcado distancias con algunos dirigentes del “procés” e intenta evitar que la agitación de una campaña catalana pueda influir en la situación de un País Vasco normalizado con la gestión de Urkullu, que parte claramente como favorito. Tras la convocatoria del gobierno de Vitoria, el gallego Núñez Feijóo se apresuró a dar por finalizada la legislatura y convocarlas el mismo día con el argumento de un ejercicio de responsabilidad para evitar el panorama del resto de España con “elecciones a troche y moche”, pero también ha querido evitar cualquier posible coincidencia con las elecciones catalanas y aprovechar que las encuestas le colocan en una buena posición para revalidar su mayoría absoluta e incluso reforzar su posición de cara a un posible asalto al liderazgo del PP estatal si Pablo Casado no se consolida. Lo que sí volveremos a tener es un 2020 electoral, y después de las dos elecciones generales más las municipales y europeas del 2019, afrontaremos ahora las de las comunidades históricas, porque a las vascas y gallegas se sumarán con toda seguridad las elecciones catalanas que, de cumplirse el anuncio de Torra, tendrían que celebrarse antes del verano y una vez aprobados los presupuestos de la Generalitat. Se mantendrá el clima electoral permanente que está marcando la vida política española con todo lo que comporta y lo que puede afectar al debate presupuestario en el Congreso y a la estabilidad de un gobierno que ha nacido con apoyos muy precarios y en la que jugarán un papel importante algunos de los protagonistas de estas campañas como el PNV, el BNG o Esquerra en Catalunya.