Reclamación al seguro por el apagón en Lleida: pasos para solicitar indemnizaciones
Tras el corte eléctrico masivo en Lleida, Catalunya y España, los afectados pueden solicitar compensaciones por alimentos deteriorados y aparatos dañados siguiendo un proceso específico

Uno de los perjuicios más comunes tras un apagón prolongado es la pérdida de productos refrigerados o congelados.
El apagón general que experimentó Lleida, Catalunya y España este lunes ha dejado a miles de ciudadanos con dudas sobre cómo solicitar indemnizaciones por los daños sufridos. Aunque no existe una cobertura automática en estos casos, hay procedimientos concretos para gestionar reclamaciones ante las aseguradoras, especialmente si se demuestra que el origen del corte está relacionado con un fenómeno atmosférico. Los expertos del sector asegurador señalan que el éxito de estas gestiones depende fundamentalmente de «documentar minuciosamente los daños y acreditar la causa del apagón».
La magnitud del corte eléctrico ha provocado numerosos perjuicios económicos en hogares de todo el país, desde la pérdida de alimentos refrigerados hasta daños en dispositivos electrónicos. Las compañías aseguradoras ya están recibiendo las primeras consultas, mientras los afectados intentan recopilar pruebas que demuestren la relación directa entre el apagón y los desperfectos sufridos en sus domicilios.
Daños cubiertos por el seguro tras un apagón eléctrico
Las pólizas de hogar suelen contemplar determinados tipos de daños derivados de cortes en el suministro eléctrico, aunque siempre es necesario revisar las condiciones particulares de cada contrato. Entre los daños más frecuentes que pueden reclamarse destacan:
Alimentos deteriorados: Uno de los perjuicios más comunes tras un apagón prolongado es la pérdida de productos refrigerados o congelados. Para justificar esta reclamación, es fundamental conservar los tiques de compra que acrediten el valor económico de los alimentos perdidos. Este tipo de cobertura suele estar incluida en muchas pólizas estándar, aunque con límites específicos en la cantidad máxima reembolsable.
Aparatos electrónicos dañados: Las fluctuaciones de tensión que se producen tanto en el momento del corte como durante el restablecimiento del servicio pueden provocar averías en electrodomésticos y dispositivos electrónicos. En estos casos, además de las facturas de compra, puede ser necesario un informe técnico que certifique que el daño se produjo por causas eléctricas externas y no por el desgaste natural del aparato.
Procedimiento para reclamar compensaciones
El proceso para solicitar indemnizaciones por los daños causados por el apagón sigue un protocolo establecido que conviene conocer para maximizar las posibilidades de éxito:
1. Notificación inmediata: Es imprescindible contactar con la compañía aseguradora lo antes posible para informar del incidente. Muchas pólizas establecen plazos máximos para la comunicación de siniestros, por lo que la rapidez es crucial. Esta comunicación puede realizarse telefónicamente a través del servicio de atención al cliente, pero conviene solicitar un número de referencia o incidencia.
2. Elaboración de inventario: Prepara una relación detallada de todos los bienes dañados o inutilizados, incluyendo descripciones precisas, marcas, modelos y, si es posible, fechas de adquisición. Este documento debe ser lo más exhaustivo posible, ya que servirá como base para la valoración económica del siniestro.
3. Documentación probatoria: Reúne todos los documentos que puedan servir como prueba, entre ellos:
- Facturas o tiques de compra de los alimentos malogrados
- Comprobantes de adquisición de los aparatos afectados
- Fotografías o vídeos que muestren el estado de los bienes tras el apagón
- Comunicados oficiales de la compañía eléctrica que confirmen el incidente
- Informes técnicos, en caso de averías en equipos electrónicos
4. Presentación formal: Sigue las indicaciones específicas de tu aseguradora para formalizar la reclamación. Aunque inicialmente pueda hacerse por teléfono, es recomendable presentar también un escrito detallado con toda la documentación adjunta, preferiblemente por un medio que permita acreditar su recepción.
Aspectos clave a considerar en la reclamación
El éxito de la gestión dependerá en gran medida de varios factores que conviene tener en cuenta:
Origen del corte eléctrico: La normativa española establece que el Consorcio de Compensación de Seguros generalmente no cubre las interrupciones en el suministro eléctrico, salvo que estas sean consecuencia directa de un fenómeno atmosférico extraordinario. Si se confirma este origen, las posibilidades de obtener compensación aumentan considerablemente. Los informes preliminares sobre el reciente apagón apuntan a una posible relación con fenómenos atmosféricos, lo que podría favorecer a los afectados.
Cláusulas específicas: Es fundamental revisar detenidamente las condiciones de la póliza contratada, ya que algunas incluyen coberturas específicas para daños derivados de cortes de suministro eléctrico. Estas cláusulas pueden variar significativamente entre diferentes compañías e incluso entre distintos tipos de pólizas de una misma aseguradora.
Acreditación técnica: Tal como señalan desde Nationale-Nederlanden, resulta esencial que el asegurado pueda demostrar la relación causa-efecto entre el apagón y los daños reclamados. Un informe técnico emitido por la compañía eléctrica o por un perito independiente puede resultar determinante en este sentido.
Límites indemnizatorios: Incluso en los casos en que la reclamación prospere, es importante saber que las cuantías a percibir pueden estar sujetas a limitaciones. La normativa establece que, en determinados supuestos, estas indemnizaciones no podrán superar el 10% de la facturación anual, lo que puede reducir significativamente el importe final.
Alternativas a la reclamación al seguro
Además de acudir a la compañía aseguradora, los afectados tienen otras vías para intentar obtener compensación por los daños sufridos:
Reclamación directa a la distribuidora eléctrica: La legislación vigente permite a los usuarios presentar reclamaciones directamente ante la empresa distribuidora o comercializadora responsable del suministro. Este procedimiento puede iniciarse paralelamente a la gestión con el seguro, aunque conviene informar a ambas partes de esta circunstancia para evitar posibles duplicidades en las indemnizaciones.
Reclamación colectiva: En casos de apagones masivos como el ocurrido, pueden organizarse reclamaciones conjuntas a través de asociaciones de consumidores, lo que suele reforzar la posición negociadora de los afectados frente a las grandes compañías.
¿Qué ocurre si la aseguradora rechaza la reclamación?
Si tras presentar toda la documentación requerida la compañía aseguradora deniega la indemnización, los afectados pueden recurrir a:
- El Servicio de Atención al Cliente de la propia aseguradora
- El Defensor del Asegurado, si existe esta figura en la compañía
- La Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones
- La vía judicial, como último recurso
¿Cómo afecta este tipo de reclamación a la prima del seguro?
Una duda frecuente entre los asegurados es si presentar una reclamación por daños derivados de un apagón puede incrementar el coste de la póliza en renovaciones futuras. Aunque técnicamente estos siniestros no deberían afectar a la prima por tratarse de circunstancias extraordinarias ajenas al asegurado, la práctica demuestra que algunas compañías pueden revisar las condiciones económicas tras acumularse varias reclamaciones en un mismo periodo.
El apagón eléctrico y sus implicaciones legales
El corte de suministro eléctrico masivo experimentado en España plantea interesantes cuestiones desde el punto de vista legal y de la responsabilidad civil. Según establece la Ley del Sector Eléctrico, las empresas distribuidoras deben garantizar un servicio continuo y de calidad, estando obligadas a indemnizar a los usuarios en caso de interrupciones que superen determinados umbrales.
Los expertos jurídicos señalan que, independientemente de la causa original del apagón, las compañías eléctricas tienen una responsabilidad objetiva frente a los usuarios por la prestación del servicio. Esto significa que, salvo en circunstancias muy excepcionales como catástrofes naturales de gran magnitud, deberían responder por los daños causados, ya sea directamente o a través de los seguros de responsabilidad civil que están obligadas a mantener.
Mientras se esclarecen las causas exactas del reciente apagón, lo más recomendable para los afectados es iniciar cuanto antes los trámites de reclamación, tanto ante sus aseguradoras como ante las compañías eléctricas, recopilando todas las pruebas posibles que acrediten la relación entre el corte de suministro y los daños sufridos. La experiencia de situaciones similares demuestra que una actuación rápida y bien documentada aumenta considerablemente las posibilidades de obtener una indemnización adecuada.