El Estatuto de los Trabajadores resuelve la duda: ¿Se pueden recuperar los días si tienes que coger la baja durante las vacaciones?
Conoce qué pasa si te pones enfermo durante tus días de vacaciones

Vacaciones.
En España, la normativa laboral protege a los trabajadores que se ponen enfermos durante sus vacaciones programadas. Según recuerda el Estatuto de los Trabajadores, los empleados tienen derecho a recuperar los días de descanso que coincidan con una baja médica, una situación que afecta a numerosos trabajadores cada año, especialmente durante la temporada estival. Esta protección legal permite que los días de incapacidad temporal no computen como parte del periodo vacacional, salvaguardando así uno de los derechos laborales fundamentales.
Con la llegada del verano, miles de trabajadores se preparan para disfrutar de su descanso anual, momento en que muchos sufren el denominado "síndrome de las vacaciones", cayendo enfermos precisamente cuando comienza su periodo de desconexión. El fenómeno no es casualidad: tras meses de alta presión laboral y niveles elevados de cortisol, el cuerpo reacciona cuando finalmente se relaja, manifestando síntomas que habían permanecido latentes durante la actividad laboral. Ante esta realidad, la legislación española contempla mecanismos de protección para garantizar que los trabajadores no pierdan sus días de descanso por causas médicas justificadas.
El artículo 38.3 del Estatuto de los Trabajadores establece claramente que "en el supuesto de que el período de vacaciones coincida con una incapacidad temporal por contingencias distintas a las derivadas del embarazo, el parto o la lactancia natural, que imposibilite al trabajador disfrutarlas, total o parcialmente, durante el año natural a que corresponden, el trabajador podrá hacerlo una vez finalice su incapacidad y siempre que no hayan transcurrido más de dieciocho meses a partir del final del año en que se hayan originado".
Cómo recuperar los días de vacaciones por enfermedad
El procedimiento para recuperar estos días de vacaciones es relativamente sencillo, aunque requiere seguir ciertos pasos formales. En primer lugar, el trabajador debe solicitar una baja médica oficial que acredite su estado de salud durante el periodo afectado. Este documento es fundamental, ya que constituye la prueba legal de la incapacidad temporal que justifica la imposibilidad de disfrutar adecuadamente del descanso programado.
Una vez finalizada la baja médica, el empleado tiene derecho a solicitar a la empresa la reprogramación de los días de vacaciones coincidentes con su incapacidad. Es importante destacar que la ley otorga un plazo considerable para ejercer este derecho: hasta 18 meses desde el final del año en que se originaron las vacaciones. Por ejemplo, si un trabajador enferma durante sus vacaciones en agosto de 2025, tendrá hasta junio de 2027 para disfrutar de esos días recuperados.
Esta normativa responde a la necesidad de garantizar que las vacaciones cumplan efectivamente su función de descanso y recuperación. Como ha señalado en repetidas ocasiones el Tribunal de Justicia de la Unión Europea, el derecho a vacaciones anuales retribuidas es un principio fundamental del Derecho social comunitario, cuya finalidad es permitir que los trabajadores descansen y dispongan de un período de ocio y esparcimiento.
El mínimo legal de vacaciones en España
El sistema laboral español establece un mínimo de vacaciones anuales que todo trabajador debe disfrutar obligatoriamente. Según el artículo 38 del Estatuto de los Trabajadores, cada empleado tiene derecho a 30 días naturales retribuidos, lo que equivale a 4 semanas completas de descanso. Si el cálculo se realiza en días hábiles, el mínimo legal se sitúa en 22 días laborables.
Este derecho constituye una garantía mínima que puede ser ampliada mediante negociación colectiva o acuerdos específicos entre empresa y trabajador. Muchos convenios colectivos en España establecen periodos vacacionales superiores al mínimo legal, alcanzando en algunos sectores hasta 31 o 32 días naturales.
La planificación de estos periodos suele ser objeto de negociación entre empleador y empleado, debiendo conocer el trabajador las fechas de sus vacaciones con al menos dos meses de antelación. Sin embargo, con la llegada del verano, no es infrecuente que surjan conflictos relacionados con la elección y disfrute de estos días, especialmente en sectores con alta actividad estacional.
El síndrome de las vacaciones: por qué enfermamos al descansar
El fenómeno por el cual muchas personas enferman precisamente cuando comienzan sus vacaciones tiene una explicación fisiológica. Durante largos periodos de estrés laboral, el cuerpo mantiene elevados los niveles de cortisol, la hormona relacionada con la respuesta al estrés, que funciona como un supresor natural del sistema inmunológico.
Cuando finalmente se reduce la presión y el cuerpo entra en modo de relajación, los niveles de cortisol disminuyen bruscamente, permitiendo que el sistema inmunológico se reactive. Es en este momento cuando pueden manifestarse patologías que estaban siendo enmascaradas por el estado de alerta constante: resfriados, procesos gripales, migrañas o problemas gastrointestinales que estaban latentes durante el periodo de mayor actividad laboral.
Los expertos en medicina laboral recomiendan una desconexión gradual del trabajo en los días previos a las vacaciones, así como mantener hábitos saludables durante todo el año para minimizar este efecto. La hidratación adecuada, una alimentación equilibrada y la práctica regular de ejercicio físico pueden ayudar a reducir el impacto del estrés sobre el sistema inmunológico.
¿Qué hacer si la empresa no respeta este derecho?
En caso de que una empresa se niegue a reconocer el derecho a recuperar los días de vacaciones coincidentes con una baja médica, el trabajador dispone de varias vías para reclamar. El primer paso recomendado es intentar resolver la situación mediante el diálogo directo con la empresa o a través de los representantes sindicales, si los hubiera.
Si esta vía no resulta efectiva, el empleado puede presentar una reclamación formal ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, organismo encargado de velar por el cumplimiento de la normativa laboral. También existe la posibilidad de iniciar un procedimiento judicial mediante demanda ante los Juzgados de lo Social, donde el trabajador podrá reclamar su derecho a disfrutar de los días de vacaciones no gozados por enfermedad.